Los Bomberos trabajaron por más de una hora para lograr sofocarlo.
Un incendio de enormes proporciones se desató en el negocio de Super Colchones de la colonia Guadalupe de Monclova, afortunadamente los empleados lograron ponerse a salvo, registrándose solo perdidas millonarias.
Fue al filo de las 12:00 horas, cuando una llamada al 911 alertaba a las autoridades sobre un incendio que iniciaba en el local de Super Colchones, ubicado en la esquina de la avenida Acereros y el bulevar Francisco I. Madero.
Agustín Ramos director de Protección Civil de Monclova, señalo que, al parecer, un corto circuito inicio las chispas, las cuales alcanzaron material almacenado ahí, en su mayoría colchones y bases de madera, alimento ideal para iniciar un incendio.
Al no poder ser contenido el fuego por el personal que ahí trabaja abandonaron el edificio para ponerse a salvo y dejaron que los bomberos actuaran.
Varias cuadrillas de Bomberos llegaron de inmediato, pero el fuego ya había comenzado a devorar con enormes llamas los colchones que estaban en exhibición, para ese momento personal de Protección Civil ya había acordonado el área, elementos de Seguridad Pública Municipal ya había cerrado las calles aledañas, paramédicos de Cruz Roja se hacían presentes para apoyar a los bomberos, ya que además de luchar con el fuego, lidiaban con las bocanadas de humo que salían por cada ventana, puerta y boquetes del edificio.
Minutos más tarde llegaron también elementos del cuerpo de Bomberos de Frontera al mando de Angelo Grimaldo director de Protección Civil de dicho municipio, para a apoyar, puesto que por un momento el fuego fue imponente y no daba un paso atrás.
Alrededor de cinco pipas cargadas con agua abastecían las motobombas de ataque rápido, pero parecía imposible apagar, el fuego, pues por más de una hora el humo seguía saliendo de color negro lo que indicaba que estaba consumiendo y creciendo dentro del inmueble.
Varios minutos después cerca de tres vulcanos se retiraron de la principal línea de ataque para tomar aire y agua, que estaban sufriendo una intoxicación, pero su experiencia los hizo retirarse a tiempo, para poder volver al combate.
“Otros sufrieron un cansancio importante, ya que estuvieron al sol y sintiendo el calor intenso de las llamas, cargando sus trajes de 13 kilos, más 12 kilos adicionales los que llevaban equipo de respiración y algunos mojados podían duplicar ese peso, por lo que fue una batalla difícil y muy peligrosa”, dijo uno de los Bomberos.
En el incendio se implementaron varias estrategias, una de ellas fue romper la pared trasera del negocio para poder despejar el humo, una vez que las llamas fueron sofocadas y así poder atacar con chorro de agua de otro ángulo.
Afortunadamente, no se reportaron personas lesionadas y los bomberos todos fueron atendidos en el lugar sin complicaciones o daños graves, quienes salieron por su pie, pero con una fatiga inmensa.
El incendio podía verse desde cualquier punto de la ciudad, debido a las inmensas columnas de humo que se estuvieron elevando por varios minutos.