Las enfermedades de la glándula tiroides, como hipertiroidismo y hipotiroidismo pueden afectar a cualquier persona.
Estar atento a los síntomas puede ayudar a recibir un tratamiento a tiempo y adecuado. Los síntomas suelen ser pérdida o aumento de peso de manera excesiva, colesterol alto, estreñimiento, depresión, mal humor y tristeza además de caída de cabello, es momento de comenzar a tomar en serio la enfermedad de tiroides y comenzar a adoptar hábitos saludables como los siguientes:
Estos son los hábitos saludables que ayudan a cuidar la salud de la tiroides.
Ejercicio moderado. Las personas que tienen problemas de tiroides deben hacer ejercicio de manera regular ya que el ejercicio demasiado intenso es perjudicial para la función tiroidea.
Descanso y recuperación. Dormir de siete a nueve horas ayuda al cuerpo a descansar y recuperarse. Esto reducirá la producción de la hormona del estrés, lo que provoca un desequilibrio de las hormonas tiroideas.
Vitamina D. Exponerse al sol ayuda al buen funcionamiento de la tiroides. Se recomienda exponerse de 15 a 20 minutos al día al sol.
Comida y nutrición. Para garantizar la producción adecuada de hormonas tiroideas, se recomiendan los alimentos integrales y las fuentes vegetales.
Hierro. Se recomienda que las personas consuman entre su dieta verduras de hoja verde, legumbres, nueces, semillas tomates, ostras, champiñones blancos y jugo de ciruela para que obtengan la cantidad de hierro necesarias.
Yodo. Sal yodada, plátano, ciruelas pasas, maíz, frijoles, nori, algas, papa, fresas y arándanos, así como pescado y otros mariscos.
Zinc. Cacahuetes, anacardos, almendras, piñones, semillas de chía, semillas de calabaza y zapallo, legumbres, ostras y carnes rojas.
La enfermedad de tiroides si se detecta a tiempo puede ser tratada y los pacientes llevar una buena calidad de vida.