A medida que el mundo se calienta, la atmósfera contiene más vapor de agua, lo que aumenta el riesgo de fuertes lluvias en algunas partes del mundo.
Las tormentas que desataron inundaciones torrenciales en Grecia, Turquía y Bulgaria causaron la muerte de por lo menos 11 personas, informaron las autoridades el miércoles.
Las aguas altas en el noroeste de Turquía, incluido Estambul, convirtieron las calles en ríos caudalosos, mientras que las inundaciones azotaron a Grecia, que se recupera de enormes incendios forestales.
A medida que el mundo se calienta, la atmósfera contiene más vapor de agua, lo que aumenta el riesgo de fuertes precipitaciones en algunas partes del mundo, sobre todo en Asia, Europa Occidental y América Latina.
La tormenta, bautizada "Daniel" por los meteorólogos griegos, azota el país desde el lunes, afectando principalmente la región central de Magnesia y a su capital, Volos, 300 kilómetros al norte de Atenas.
Una mujer de 87 años desaparecida desde el martes fue hallada muerta el miércoles en la localidad de Paltsi, en Magnesia, informó el portavoz del cuerpo de bomberos, Yannis Artopios, a la cadena pública Ert.