La hipertensión, un trastorno cardiovascular que no distingue por edad, demanda una revisión urgente de tus elecciones alimenticias.
Las estadísticas no mienten: según un estudio de la agencia Blue Cross Blue Shield en 2019, la prevalencia de hipertensión en personas de 21 a 36 años aumentó en un 16% entre 2014 y 2017.
Esto demuestra que la salud circulatoria no es solo una preocupación de la tercera edad, sino de todas las generaciones. Si te encuentras en la lucha contra la hipertensión, los siguientes cuatro alimentos deben ser excluidos de tu dieta de inmediato.
Alimentos que dañan la presión arterial
Papas fritas
Las irresistibles papas fritas, queridas por muchos, son una fuente oculta de sodio y grasa que puede sabotear tus esfuerzos por controlar la hipertensión.
La combinación de sal y grasa no solo afecta tu presión arterial, sino que también aumenta los niveles de colesterol y favorece la acumulación de grasa abdominal.
Estudios incluso han relacionado el consumo regular de papas fritas con un incremento en las enfermedades cardíacas.
Opta por opciones de bocadillos más saludables como frutas frescas, nueces y yogur bajo en grasa.
Sopas enlatadas
Si buscas una comida rápida y caliente, las sopas enlatadas pueden parecer la solución perfecta. Sin embargo, estas aparentes comidas convenientes ocultan un exceso de sodio.
Algunas sopas enlatadas, como la sopa de pollo con fideos de Campbell's, contienen 790 mg de sodio por porción, superando las recomendaciones diarias de sodio de las asociaciones cardíacas.
El alto contenido de sal en estas sopas puede elevar tu presión arterial y agravar tus problemas de salud. Opta por sopas caseras o versiones bajas en sodio.
Refrescos
Los refrescos, conocidos por su alto contenido de azúcar, son especialmente peligrosos para aquellos que enfrentan la hipertensión.
Estudios han demostrado que el consumo regular de bebidas azucaradas está vinculado a una mayor probabilidad de tener una presión arterial elevada, aumentando así el riesgo de problemas cardiovasculares.
Además de su impacto en la presión arterial, los refrescos están asociados con otros efectos negativos para la salud. Opta por agua, té sin azúcar o infusiones naturales para mantener tu presión arterial bajo control.
Aderezos para Ensaladas
Los aderezos para ensaladas pueden esconder un ingrediente sorpresa: jarabe de maíz de alta fructosa.
Un consumo excesivo de azúcares como este jarabe puede aumentar el riesgo de obesidad y presión arterial alta.
Investigaciones también han relacionado el exceso de fructosa con un mayor riesgo de hipertensión. Opta por aderezos caseros con ingredientes naturales o vinagretas bajas en azúcar.