El comité de Evaluación de Riesgos de Farmacovigilancia (PRAC) de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) está revisando los datos sobre el riesgo de pensamientos suicidas y de autolesión con la toma de medicamentos conocidos como agonistas del receptor GLP-1, incluidos los conocidos Ozempic (semaglutida), Saxenda (liraglutida) y Wegovy (semaglutida).
Los dos últimos están autorizados para bajar de peso, mientras que el primero es un fármaco para tratar la diabetes tipo 2, aunque se está utilizando fuera de indicación para adelgazar.
La revisión fue iniciada por la agencia de medicamentos de Islandia, que está analizando alrededor de 150 informes de posibles casos de pensamientos suicidas y autolesiones en personas que usan liraglutida y semaglutida. Estos dos fármacos son ampliamente utilizados, con una exposición de más de 20 millones de pacientes-año hasta la fecha (un paciente-año es el equivalente a que un paciente tome un medicamento durante un año). La EMA aclara en su nota informativa que todavía no está claro si los casos notificados están relacionados con los medicamentos mismos o con las condiciones subyacentes de los pacientes u otros factores.
En este sentido, el doctor Cristóbal Morales, endocrinólogo e investigador español con experiencia en más de 140 ensayos clínicos en obesidad, diabetes y riesgo cardiovascular con moléculas como Semaglutida, Tirzepatide, Retratutide, AMG 133, CagriSema, Orforglipron, Survodutide o Lotiglipron, explica a ABC que para evaluar correctamente los riesgos de estos fármacos en la parte psicológica, «en todos los ensayos clínicos con GLP-1 uno de los criterios para excluir a un participante es haber tenido previamente episodios de depresión mayor o autolesiones». «Pasa igual en la cirugía bariátrica. No operan a nadie sin una evaluación psicológica positiva», aclara el experto, que afirma que siete de cada diez personas con obesidad ha sufrido en algún momento trastornos de ansiedad o depresión.
La experiencia del doctor Morales, tanto en la parte investigadora como en la clínica, con la familia GLP-1 es que, en general, no se ha encontrado ningún caso de afectación negativa de la salud mental. «Al contrario. En los ensayos clínicos de obesidad, metodológicamente, no solo se valora la pérdida de peso si no la satisfacción y calidad de vida del paciente. Hay evidencia de que durante la toma de estos fármacos mejora el estado anímico, la calidad de vida y la percepción de salud de los participantes, con datos publicados«, afirma el endocrinólogo e investigador, que recuerda que liraglutida y semaglutida se comercializan desde hace 14 años y se les considera seguros en riesgo-beneficio.
Además, prosigue el experto, durante los ensayos con estos medicamentos se evalúa constantemente el bienestar emocional de los participantes con el test de Columbia de ideación suicida, especialmente desde que hace 15 años Europa tuviera que retirar del mercado el fármaco para la obesidad Rimonabant, comercializado como Acomplia, un antagonista selectivo del receptor cannabinoide CB1, cuyo principal efecto era la reducción del apetito, pero que también se vio que podían aumentar la ideación suicida.
Desde Novo Nordisk, laboratorio que comercializa Ozempic, Wegovy y Saxenda, aseguran que las autoridades no se han puesto en contacto con ellos en relación con estos posibles efectos secundarios. «La evaluación de los datos de seguridad obtenidos a partir de programas extensos de ensayos clínicos, la vigilancia posterior a la comercialización y otras fuentes relevantes de información no ha revelado una asociación causal entre semaglutida o liraglutida y pensamientos suicidas y autolesivos», explica a ABC el doctor Francisco Pajuelo, director médico de Novo Nordisk. En cualquier caso, este experto afirma que la seguridad de los pacientes tiene la máxima prioridad para la farmacéutica danesa que «vigila continuamente la aparición de señales de seguridad». «Nos tomamos muy en serio todos los informes sobre acontecimientos adversos derivados del uso de nuestros medicamentos», aclara el doctor Pajuelo.
Novo Nordisk insiste en que sigue confiando en el perfil de beneficio y riesgo de sus productos «basándose en la totalidad de la información disponible en la actualidad» y «colabora estrechamente con las autoridades para garantizar la seguridad de los pacientes y una información adecuada a los profesionales sanitarios». «Los arGLP-1 se han utilizado para tratar la diabetes mellitus tipo 2 durante más de 15 años y para tratar la obesidad durante 8 años, incluidos productos de Novo Nordisk cuyos principios activos son semaglutida y liraglutida, que se han comercializado durante más de 10 años», recuerda el doctor Pajuelo.
Por su parte, la revisión de liraglutida y semaglutida por parte de la EMA se lleva a cabo en el contexto de un procedimiento señalado. Una señal es información sobre un nuevo evento adverso potencialmente causado por un medicamento o un nuevo aspecto de un evento adverso conocido que justifica una mayor investigación. Pero la presencia de una señal no significa necesariamente que un medicamento haya causado el evento adverso en cuestión.
Saxenda y Wegovy están autorizados para el control de peso, junto con la dieta y la actividad física en personas obesas o con sobrepeso, en presencia de al menos un problema de salud relacionado con el peso. Ozempic está indicado para el tratamiento de adultos con diabetes tipo 2 insuficientemente controlada, como complemento de la dieta y el ejercicio, pero se ha utilizado de forma no autorizada para perder peso. El comportamiento suicida no figura actualmente como un efecto secundario en la información del producto de la UE para ningún agonista del receptor GLP-1.
La revisión de Ozempic, Saxenda y Wegovy comenzó el 3 de julio de 2023 y ahora se ha ampliado para incluir otros agonistas del receptor GLP-1. Se espera que esta revisión concluya en noviembre de 2023.