Bienvenidos a su humilde columna, que ni es humilde ni es su columna.
Dicho lo anterior, empecemos.
Aquí ya hemos hablado de tocho morocho en el sentido de la crisis que impera en Ahmsa y que los obreros se la están viendo bien difícil volteando a todos los santos de cabeza para que pueda reactivarse la empresa y con eso sus salarios, que por cierto tienen muchos atrasados.
Pero hay un tema que no hemos tocado, es el de los empresarios, los acreedores, aquellos que prestaban diversos servicios a Altos Hornos y que también hoy quedaron a la deriva, que hoy en este impreso le damos a conocer en la página cuatro, se trata de empresarios que su salud ha mermado derivado de la situación que hay con la empresa, ya ha cobrado la vida de una persona y algunos otros han padecido hasta de infartos por la preocupación que llevan a cuestas.
Y es que las deudas de usted y mía, las de una simple mortal, no son nada comparadas con las de los empresarios que pelean por millones de pesos, millones de pesos que con esta ciudad en crisis difícilmente se puede dar la vuelta y tratar de recuperarse de otra forma.
Estamos fritos, y seguimos siendo el “juguetito” del presidente, ni nos voltea a ver, y supongo que ese capricho suyo ya no se le quitó, todavía nos “cuelga” un año más que estará en el mandato, mientras, pues a ver cómo le hacemos.
No entiende...
Hablando de caprichos del presidente, otro de los temas que sigue dando de qué hablar, son los libros de texto gratuito, con lo que no contaba AMLO es que ahora hasta su misma gente se le está volteando y es que no se puede defender lo indefendible, ahí está la diputada de Morena, que ayer salió a decir que teme por su integridad física porque se mostró en contra del contenido que viene en los libros y que será repartido entre mis hijos y los suyos.
También la iglesia católica se acaba de mostrar en contra de la distribución de los libros, y es que se tocan temas bastante sensibles, que no es nada necesario entre la educación de los niños de primaria. Se trata de sentar las bases de la educación de quienes más adelante estarán al frente de empresas, partidos, servicios y con este tipo de enseñanzas, pues veremos.
Pero el cabeza de algodón no quiere dar su brazo a torcer, no quiere aceptar que no tiene la razón, es terco, pero terco como una mula diría ‘guelito’.
Y por su terquedad nos va a llevar entre las patas a todos.
¡Alguien que lo haga entender por favor!
Nombre, chango viejo no aprende maroma nueva verdad.
Salud mental
Antes de despedirme déjeme decirle, que ahora con eso de las compras del regreso a clases me di cuenta de que cada vez son más las personas que vagan por las calles con problemas de salud mental, recordé que han sido muchos los legisladores y candidatos que dicen que pugnarán por un centro de salud mental en Monclova y nos quedamos como novias de rancho, vestidos y alborotados.
Nadie cristaliza ese proyecto que ya es muy necesario entre la sociedad, esperemos que se deje de quedar en el tintero y que alguien con los desos bien puestos le entre, porque se trata de personas, de seres humanos.