La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a través de la Agencia de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos (Asea), certificó que la refinería de Cadereyta no rebasa los límites de contaminación establecidos en la legislación mexicana, lo que le permitirá seguir operando de manera regular.
Ello, en medio de la polémica que generó la planta el pasado 20 de marzo, cuando una columna de humo amarillo cubrió el cielo de Nuevo León derivado de la falla de unos compresores, por lo que el gobierno de Samuel García advirtió que la refinería podría ser clausurada.
El informe emitido el pasado 3 de mayo y enviado a la Cámara de Diputados el 13 de junio, señala que tras una serie de evaluaciones a la calidad del aire de la planta, a través de laboratorios de prueba señalados por la Entidad Mexicana de Acreditación y aprobados por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa): "Se determinó que las concentraciones de PM10 y PM2.5 se encuentran dentro de los límites máximos establecidos en la NOM-025-SSAI-2014".
En relación con las emisiones de bióxido de azufre, la autoridad indicó que "su concentración dentro del ambiente se encuentra dentro de los parámetros establecidos en las normas NOM-128-SEMARNAT-2006 y NOM-085-SEMARNAT-2011".
El análisis derivó de un punto de acuerdo aprobado en la Cámara de Diputados:
"La Cámara de Diputados del Honorable Congreso de la Unión, exhorta respetuosamente a la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos, para que, en el ejercicio de sus atribuciones de supervisión sobre la refinería de Cadereyta, en el estado de Nuevo León, verifique al cumplimiento de las disposiciones jurídicas en materia ambiental", precisó.
Al respecto, la Unidad de Supervisión, Inspección y Vigilancia Industrial de la Agencia detalló que permanentemente verifica que la Refinería Ing. Héctor R. Lara Sosa, mejor conocida como Cadereyta, cumpla con lo establecido en la Ley General del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente, el Reglamento de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente en materia de Prevención y Control de Contaminación de la Atmósfera, el de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente en Materia de Registro de Emisiones y Transferencia de Contaminantes, así como a las normas NOM-148-SEMARNAT-2006 Contaminación Atmosférica-Recuperación de Azufre proveniente de los procesos de refinación del petróleo y NOM-085-SEMARNAT-2011.
Dijo que la supervisión realizada a petición del Congreso de la Unión, consistió primordialmente en verificar si contaba con licencia ambiental; se realizó la evaluación y medición de la totalidad de las emisiones contaminantes a la atmósfera y el registro de los resultados en el formato establecido por la Semarnat; si se ha efectuado el monitoreo perimetral de sus emisiones contaminantes a la atmósfera, y si cuenta con bitácoras de operación y mantenimiento de sus equipo de proceso y de control.
Asimismo, se verificó si Pemex dio avisos anticipados a la Semanat del inicio de operación de sus procesos en caso de paros programados y de inmediato en caso de paros circunstanciales, así como fallas del equipo de control; si el establecimiento ha presentados cédula de operación anual con sello de recepción por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y si en dicha cédula de operación anual están registrados todos los equipos de proceso y de control, así como el inventario y reporte de las emisiones que se generan en los mismos y si el establecimiento cuenta con permisos para combustión a cielo abierto.
Finalmente, la Agencia de Seguridad Industrial puntualizó que como parte del informe se revisó si los equipos que emiten olores, gases o partículas sólidas o líquidas hacia la atmósfera, cuentan con plataformas o puertos de muestro.
En todos los casos, expuso la agencia, se cumplió con las normas establecidas.
La refinería de Cadereyta abastece de combustible a los estados de Nuevo León, Coahuila, Chihuahua y de manera parcial a Durango, San Luis Potosí, Tamaulipas y Zacatecas, de acuerdo con información de Pemex.
Las denuncias iniciaron en julio del año 2020, cuando también circuló en redes sociales un video en el que una gruesa columna de humo amarillo se eleva de la planta con dirección al centro histórico de Monterrey, la capital estatal.
En aquel entonces el gobierno de Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco presentó una denuncia a la Fiscalía General de la República (FGR) y la Asea e, incluso, hubo solicitudes de aprobación de puntos del Congreso de la Unión para exigir la comparecencia del director general de Petróleos Mexicanos, Octavio Romero Oropeza, por el hecho.