La siderúrgica emitió un comunicado este viernes explicando la situación actual en que se encuentra.
El futuro se muestra opaco para AHMSA. Derivado del colapso en la Coquizadora en la Planta 1 de Altos Hornos de México, la siderúrgica informó que se retrasará indefinidamente el reinicio de la producción, además de complicarse el proceso para la toma de control por los nuevos inversionistas.
Tal situación fue dada a conocer mediante un comunicado difundido durante el mediodía de este viernes, un día después de agotarse el tiempo en la Coquizadora de la Planta 1.
"Altos Hornos de México S.A.B. de C.V. (AHMSA) informa que derivado del bloqueo de las plantas siderúrgicas de la empresa en Monclova, por activistas del Sindicato Nacional Minero, se hizo imposible proveer gas para mantener la temperatura de los hornos en la Planta Coquizadora 1, unidad que fue puesta en proceso de enfriamiento con daño en su estructura refractaria interior, lo que retrasará indefinidamente el reinicio de producción de la empresa, complicando el proceso de toma de control por los nuevos inversionistas", señala el referido comunicado, difundido en las redes sociales de la empresa siderúrgica, ubicada en Monclova, Coahuila.
Cabe recordar que ayer, jueves 27 de julio, los obreros de AHMSA, exaltados por la falta de sueldo con 10 semanas de salario caído, mantuvieron su negativa a permitir la salida de camiones con chatarra de chorreaduras de arrabio (fierro de primera fusión), que Altos Hornos vendía para obtener recursos para cubrir pago de electricidad, gas y salarios para los trabajadores sindicalizados y de confianza. Ante ello, la Coquizadora quedó inservible, y para repararla y ponerla en funcionamiento se necesitarán 8 meses de intenso trabajo y millones de dólares, indicó una fuente informativa a El Siglo.
Previo a la crisis, Altos Hornos tenía un proyecto de inversión de 350 millones de dólares para construir una Coquizadora totalmente nueva. Rehabilitar la colapsada será costoso, pero AHMSA no tiene recursos para eso. El futuro de AHMSA es hoy más incierto. Con los equipos de producción inservibles y cortados sus suministros propios para producir, se desplomó su valor y atractivo para los inversionistas, pues será mucho más costoso ponerla a funcionar y aún continúa ahogada por las deudas de Hacienda, IMSS, Infonavit, Finanzas del Estado, impuestos municipales, y a proveedores, prestadores de servicios y trabajadores sindicalizados y de confianza.