Por la colocación de un muro de boyas en el Río Bravo por el gobierno de Texas, ya se preparan demandas del gobierno mediante la Embajada en Washington.
A la nota diplomática enviada el pasado 26 de junio por la Secretaría de Relaciones Exteriores al Departamento de Estado de Estados Unidos por la colocación de un muro de boyas en el Río Bravo por parte del gobierno de Texas, ya se prepararán las demanda que interpondrá el gobierno de México a través de la embajada en Washington por el riesgo que representa para los migrantes, además de la violación al Tratado de Aguas México-Estados Unidos, anunció el embajador Esteban Moctezuma.
El diplomático sostuvo este jueves una reunión con integrantes de la Comisión Internacional de Límites y Aguas México-Estados Unidos para observar el cauce legal que se le dará a la demanda de nuestro país.
Derechos Humanos. La colocación de boyas con alambres de púas y navajas, en parte del cauce del Río Bravo, es violatorio de los acuerdos entre Estados Unidos y México, resaltó en esta ocasión.
unto con la comisionada de @cilamexico, Adriana Reséndez, la cónsul de México en Eagle Pass, @vivianjuarezm y el equipo de @EmbamexEUA, revisamos sus implicaciones bajo el Tratado de Aguas México-EUA y su impacto en la seguridad de migrantes, para que México pueda realizar las demandas procedentes”, informó a través de sus redes sociales. La secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena informó que entregaron al Departamento de Estado una nota diplomática por las acciones emprendidas por el gobierno del Republicano Greg Abott para frenar la migración ilegal, que contravienen las leyes entre ambos países y atentan contra la seguridad de los migrantes mexicanos y de otras nacionalidades.
Antecedente. El 15 de julio, el gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció la colocación de 300 kilómetros de boyas con púas y navajas en el Río Bravo, en un intento por reducir el flujo de migrantes a su estado. El presidente Andrés Manuel López Obrador tachó las medidas antimigrantes del gobernador texano como “publicitarias” y “muy vulgares”, por lo que pidió a los mexicanos que están en Texas que no voten por Abbott. Además, minimizó la extensión que cubren las boyas pues, aseguró, ocupan “300 metros” pero la frontera de México con Estados Unidos cuenta con más de 3 mil kilómetros. Cabe destacar que durante el último año, el Gobierno del estado de Texas instaló un muro flotante y cercos con alambre de púas en el Río Bravo y sus alrededores.
Las autoridades texanas instalaron las obstrucciones en el tramo del río que divide a las ciudades de Eagle Pass (Texas) y de Piedras Negras (Coahuila) para evitar el cruce de migrantes. Tras esto, el Gobierno de México envió una carta diplomática a Estados Unidos para manifestar su preocupación por la instalación de las boyas y trascendió sobre lesiones que han tenido los migrantes al intentar cruzarlas.