Una campaña publicitaria que muestra a la fallecida Elis Regina y a su hija Maria Rita interpretando un dúo ha provocado reacciones antagónicas en las redes sociales.
En la pieza de Volkswagen, la cantante fallecida en los años ochenta fue devuelta a la vida mediante Inteligencia Artificial (IA). Aparece conduciendo una Kombi y cantando Como nuestros padres, de Belchior.
Aunque muchos fanáticos e internautas alabaron y se emocionaron con el anuncio, otros cuestionaron si es ético utilizar la imagen de una persona que ya no está viva en un contexto ficticio.
Para Arbix, utilizar la IA de forma no transparente, informada o consciente entraña muchos riesgos, sobre todo, cuando hay desplazamiento espacial o atribución de declaraciones falsas a la persona retratada.
"No porque puedas hacerlo debes hacerlo", asegura. "Una cosa es que guardes en el cajón una película de alguien que murió para verla unas cuantas veces y otra cosa es recrear (su imagen) en nuevas condiciones, como si siguiera vivo".
Según el profesor de la USP, la sociedad no está preparada para abordar este desplazamiento espacial y circunstancial de las figuras fallecidas y hacerlo puede resultar "perturbador" para algunas personas.
"La finitud de la vida está sedimentada en la historia social. Incluso para aquellos que creen en la vida después de la muerte, siempre es algo más inaccesible y distinto de lo que vemos ahora, para lo que no estamos preparados como sociedad."