La Organización Mundial de la Salud tiene previsto declarar como posible carcinógeno uno de los edulcorantes artificiales más consumidos, ésta importante decisión, basada en los hallazgos de un estudio, se espera que se haga pública a nivel mundial el próximo 14 de julio según el medio Reuters.
El edulcorante en cuestión es el aspartamo, conocido con el código E-951 en numerosas listas de ingredientes. Será clasificado por primera vez como "posiblemente cancerígeno para los humanos" por la Agencia Internacional del Cáncer (IARC), organismo público dependiente de la OMS. Este edulcorante artificial fue aprobado en algunos países de la Unión Europea en 1980 y su uso se extendió por toda la UE a partir de 1994 como sustituto del azúcar. Se utiliza comúnmente en productos como refrescos dietéticos, conocidos en la industria alimentaria como "light", así como en chicles y gomas de mascar. Según la información publicada por Reuters, esta decisión fue tomada por el Comité Conjunto de Expertos en Aditivos Alimentarios de la OMS.
Algunas decisiones de la IARC han sido catalogadas como alarmistas, por lo que surgió polémica ya que no se especifica la cantidad de producto que puede consumir una persona sin que haya riesgo.
Sobre que endulcorante es más sano, la OMS recomienda que la sacarina, la estevia, el azucarillo u otras opciones son válidas, siempre y cuando se consuman de forma moderada. No hay ninguna opción más perjudicial que la otra, aunque tampoco hay ninguna que sea especialmente saludable y se diferencie significativamente del resto. Cada opción tiene sus ventajas y desventajas. La diferencia radica en el consumidor, su estado de salud y el uso que se haga del edulcorante. Un estudio anterior advierte que el consumo inadecuado de edulcorantes puede causar daños al hígado. También se desaconseja su uso cuando se busca controlar el peso corporal o reducir el riesgo de enfermedades como la diabetes tipo 2 o enfermedades cardiovasculares.