La cantidad y clase de alimentos que consumimos durante la noche pueden afectar la calidad de nuestro sueño.
Hay una costumbre que aparentemente no tiene consecuencias negativas y que la mayoría de las personas realiza. Sin embargo, esto no implica que sea recomendable para todos. De acuerdo con expertos, la energía que tienes desde que te levantas hasta que anochece está relacionada con tu alimentación en la noche.
A continuación, te hablaremos sobre la práctica de comer durante la noche y su impacto en la calidad del sueño y la energía.
¿Comer o no de noche?
Mejor con salud dice que hay quienes aseguran que cenar por la noche es importante y no afecta la calidad del sueño. Si te acuestas sin cenar, el cuerpo puede retener carbohidratos y grasas en lugar de utilizarlos, ya que durante el sueño también se requiere energía. Es probable que aquellos que se durmieron con hambre tengan que levantarse pronto a comer, lo cual afecta las horas de sueño.
Explican que los bocadillos nocturnos agregan calorías adicionales a lo que comemos previamente, incentivando el sobrepeso. Por otro lado, las personas que toman insulina u otros medicamentos para la diabetes deben de comer de noche para tratar de prevenir un nivel bajo de glucosa sanguínea durante la noche y no comer pesado, pues esto puede ser perjudicial para su salud y el nivel de energía en su cuerpo.
En caso de que queramos comer de noche, es importante hacerlo al menos 3 horas antes de ir a dormir para evitar reflujo.
¿Qué afecta mis niveles de energía?
Sin duda, comer de noche afecta nuestros niveles de energía, pero no es el único factor, pues también importa qué tipo de alimentos ingerimos a lo largo del día. Por ejemplo, no es recomendable ingerir la comida más fuerte cerca de la hora de ir a dormir, dado que puede resultar pesado para nuestro organismo. Además, nuestro metabolismo no procesa los alimentos de la misma forma a lo largo del día. El nivel de energía que tenemos también depende de los alimentos que ingerimos y la hora en que lo hacemos.
- Alimentos con muchas calorías y carbohidratos
- Alimentos con mucha proteína
- Exceso de sal
- Lácteos
- Bebidas con cafeína
- Alimentos picantes o ácidos
- Alcohol
Comer porciones adecuadas es clave para tener más energía
Es importante entender que comer de noche no es el problema, sino lo que se come y en qué cantidades. Para evitar que la comida se vuelva un problema para conciliar el sueño y tengamos un buen nivel de energía, es importante cambiar nuestros hábitos alimenticios, explica Business Insader.
Algunas medidas que pueden tomarse son cenar más temprano; tomar un refrigerio antes de dormir; evitar comida chatarra y con muchos carbohidratos, así como evitar las comidas con mucha cafeína o alcohólicas de noche.