El Inter Miami, a la espera de la llegada del argentino Lionel Messi y del español Sergio Busquets, perdió este sábado por 1-4 en el campo del Philadelphia Union y sigue sin ver luz en la MLS estadounidense, en la que está hundido en la última plaza del Este.
Tanto Messi como Busquets, cuyo fichaje fue anunciado este viernes, no podrán debutar con el Inter Miami antes del 5 de julio, cuando abra la sesión de mercado veraniego de la MLS, y es muy probable que su estreno no se produzca antes del 21 de julio en el partido de la Leagues Cup contra el Cruz Azul.
El club del que el británico David Beckham es copropietario vive momentos de gran entusiasmo fuera del campo, pero en el terreno de juego su futbol está muy lejos de ser competitivo.
Desastrosa visita a Philadelphia
En su visita al Philadelphia Union, que el año pasado perdió la final contra el Los Ángeles FC, el Inter Miami fue superado por completo y volvió a dar una muy pobre imagen defensiva.
Recibió el primer gol en el minuto 14 con un cabezazo del noruego Jakob Glesnes en una acción originada en un saque de esquina. Fue el décimo gol a balón parado recibido por el Inter Miami este año.