La final de la Champions de balonmano entre el Magdeburg y el Kielce vivió un momento muy duro. El periodista polaco de 51 años Pawel Kotwica sufrió un infarto mientras desempeñaba su trabajo en la grada. Un episodio que acabó con un final trágico.
Talant Dujshebaev, entrenador del Kielce y leyenda del balonmano español, lo vivió en primera persona: "Íbamos ganando de dos y de repente hay un boom en las gradas. Algo le había ocurrido a un periodista polaco. Rápidamente subieron nuestro físio y nuestro médico" relata. Era el minuto 48 y su equipo le ganaba al Magdeburg de dos. En ese momento se produjo uno de los gestos de deportividad más admirables del balonmano y del deporte en general: "Estábamos ahí y se me acercó el entrenador rival para decirme que terminaramos el partido y que fueramos campeones. Faltaban 12 minutos y le dije que su gesto era grandísimo" narra Dujshebaev.
El partido se pudo reanudar y el Magdeburg remontó al Kielce de Dujshebaev para proclamarse campeón (30-29) tras una prórroga. "La vida de una persona vale más que cualquier título" reconoce Talant. La leyenda del balonmano español lleva entrenando en Polonia 9 años: "Son muchos años ya. Estoy muy contento y feliz con el proyecto". Comparte equipo con sus dos hijos, también jugadores de la selección, Alex y Dani. Preguntado por quién es el mejor jugador del mundo, lo tiene claro: "Me van a criticar, pero creo que es Alex Dujshebaev".