La selección de Brasil goleó 4-1 a Guinea este sábado en el estadio del Espanyol (Barcelona), en un juego preparatorio para el inicio del clasificatorio sudamericano hacia el Mundial de 2026 y marcado por actos en contra del racismo.
El debutante Joelinton (37) y los madridistas Rodrygo (30), Éder Militao (47) y Vinicius (88) dieron el triunfo al equipo dirigido de forma interina por Ramon Menezes, ante la ausencia de un DT en propiedad tras la salida de Tite luego del fracaso en Qatar-2022.
El ariete Serhou Guirassy (36) descontó para los africanos en un partido completamente dominado por la ‘Canarinha’ y de trámite soso.
El duelo estuvo marcado por actos en contra del racismo frente a reiterados ataques sufridos a Vinicius, estrella del Real Madrid. Sin embargo, su asesor y amigo sufrió racismo cuando estaba por comenzar del partido por parte de un agente de seguridad del estadio.
En una acción antirracista, los pentacampeones jugaron de negro el primer tiempo por primera vez en 109 años de historia. Para la segunda parte, regresaron a la tradicional camiseta amarilla con un parche contra la discriminación en el pecho.
Antes del pitazo inicial, durante un minuto de silencio, los atletas de ambos equipos se arrodillaron en el campo.
Menezes, DT del combinado brasileño sub-20, y al mando en la derrota 2-1 ante Marruecos en un amistoso en marzo, siguió como interino mientras la Confederación Brasileña de Fútbol confirma el reemplazo de Tite, con el italiano Carlo Ancelotti como “plan A”.
Sin Neymar, lesionado del tobillo derecho, Lucas Paquetá intentó enlazar las líneas frente a los africanos, que desde el comienzo apostaron por proteger el pórtico de Ibrahim Kone con un 4-5-1.
En una noche solidaria con Vinicius, que usó por primera vez la camisa 10, fue Rodrygo quien dio un poco de color a una ‘Seleção’ que apostó por algunos experimentados y chances a los debutantes Joelinton, Ayrton Lucas y Malcom.
Rodrygo cobró el tiro libre que significó el tanto de Joelinton en su primer juego internacional, al aprovechar un rebote del arquero tras un impacto de Casemiro desde el borde del área chica.
Pocos minutos después, aprovechó un robo de Richarlison a base de presión, para inmiscuirse en las 18 a pura velocidad y anotar el 2-0 con un derechazo.