Los agentes aprovecharon por un momento para hidratarse de las extremas temperaturas, las cuales rebasan los 100 grados F
Ante el intenso calor que se registra en el sur de Texas, los agentes de la guardia nacional que se encargan de vigilar la frontera para evitar qué migrantes la crucen de manera ilegal, aprovecharon por un momento para hidratarse de las extremas temperaturas, las cuales rebasan los 100 grados F, ellos se encuentran a la intemperie dentro de las unidades vigilando sin importar el sofocante que se encuentra el medio ambiente.