El Vaticano informó que el Papa Francisco sería hospitalizado por graves dolores de estómago.
Pese a que el Papa Francisco cumplió con la "audiencia general semanal", que realiza cada miércoles, luego de acabar con sus compromisos fue trasladado al hosptial Gemelli de Roma, apodado como "el Vaticano III" por el Papa Juan Pablo Segundo, debido a que -en su época como pontífice- visitó ese sanatorio en nueve ocasiones y, lamentablemente, el Papa actual pareciera estar corriendo con la misma suerte, pues luego de que, en 2021, fuera operado para que se le extirparan 33 centímetros de intestino grueso lo que, inminentemente, le trajo problemas a futuro.
Y aunque el papa sabía que tenía que ser sometido a una nueva operación para tratar la hernia abdominal que le provocó dicho procedimiento, "Daily Mail" informó que el argentino trató de extender su cirugía el mayor tiempo posible, debido al temor que le causa la anestesia general, a la cual no reaccionó muy bien en el 2021, de hecho, por esa misma razón se ha negado a ser sometido a la operación que repararía los problemas de ligamentos de sus rodillas, los que lo mantiene trasladándose en silla de ruedas, pero ¿en qué consiste una obstrucción intestinal?
Enfermedad. De acuerdo con la Clínica de Mayo, una organización sin fines de logro dedicada a la práctica clínica, una obstrucción intestinal ocurre como un bloqueo que imposibilita el paso de la comida y los líquidos por medio del intestino delgado y el intestino grueso, problema que tiene lugar, habitualmente, por una fibrosis, que se puede producir después de que una persona -como fue el caso del Papa Francisco- es sometida a una cirugía y se forma una hernia; otras de las causas derivadas son el cáncer de colon o la inflamación de los intestinos. De acuerdo a la entidad médica, es de vital importancia que el problema sea atendido de forma inmediata, pues las zonas obstruidas del intestino podrían llegar a morir, generando problemas graves en la salud de la o el paciente, por lo que es muy importante estar alerta si una persona presenta molestias como cólicos intermitentes, falta de apetito, estreñimiento, vómitos, inflamación abdominal y dificultad para defecar y producir flatulencias. La importancia de consultar a un especialista de forma oportuna radica en que una obstrucción intestinal puede generar la muerte de tejido, debido a la falta de sangre que, a su vez, puede dar lugar a un desgarro en la pared intestinal, trayendo como consecuencia una infección. Del mismo modo que puede propiciar una peritonitis que ocurre cuando una inflamación de las membranas cubre la pared abdominal y recubre los órganos que se encuentran en esa misma área es muy peligroso, ya que puede complicarse.