El líder de la Alianza afirmó que la voladura de la presa es un acto "indignante" que ha puesto en riesgo a cientos de civiles.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó este martes que la destrucción de la presa ucraniana de Nueva Kajovka es una "consecuencia directa de la guerra de agresión" que Rusia lanzó contra Ucrania y demuestra que esa invasión es "totalmente inaceptable".
"La destrucción de Kajovka demuestra la brutalidad de esta guerra y es una consecuencia de la guerra de agresión que el presidente (de Rusia, Vladímir) Putin y Moscú han lanzado contra Ucrania, señaló Stoltenberg al ser preguntado en rueda de prensa en Bratislava si tiene información de que ese ataque se pueda atribuir a Rusia.
El líder de la Alianza afirmó, como había hecho previamente, que la voladura de la presa es un acto "indignante" que ha puesto en riesgo a cientos de civiles debido a las inundaciones causadas a lo largo del río Dniéper, línea divisoria entre los ejércitos ruso y ucraniano y de cuyo colapso se acusan los dos países mutuamente.
Stoltenberg afirmó que este acto "demuestra que la guerra que el presidente Putin decidió lanzar contra Ucrania es totalmente inaceptable y contraria a la legislación internacional".