Los sueños son enigmáticos, ya que están formados por pensamientos, sensaciones e imágenes que en su mayoría se originan en nuestra mente durante el sueño y que a veces parecen carecer de sentido alguno, sin embargo, esto no implica que no puedan afectarnos.
Hay gente que ama hablar de sus sueños o se preocupa por el asunto, pero otros simplemente no sueñan o parecen no recordarlos.
¿De dónde vienen los sueños?
El psicólogo Joshua Tal le dijo al portal Well and Good que los sueños son destellos de imágenes, sonidos y recuerdos que tienen lugar mientras se duerme. “La ciencia no ha encontrado una razón definitiva para los sueños, pero los sueños parecen estar controlados por partes emocionales y de memoria del cerebro, lo que indica que ayudan con la regulación emocional y la consolidación de la memoria”.
Eso explica por qué algunos sueños pueden ser francamente extraños e incluir una mirada de recuerdos y emociones. Los mensajes subyacentes de los sueños también pueden ser útiles para procesar tus sentimientos.
Alex Dimitriu, certificado en psiquiatría y medicina del sueño, dijo que los sueños son muy probablemente la forma en que el cerebro resuelve problemas y eventos pasados, así como la planificación para el futuro.
“Los sueños nos permiten conectar conceptos e ideas sueltas, y también pueden ser una fuente de creatividad e ingenio. Asimismo, pueden ser una forma de autoterapia, ya que el cerebro puede procesar experiencias y emociones, y dar sentido a los eventos de la vida”, dijo Alex Dimitriu.
¿Por qué algunas personas no sueñan?
Según Health Digest, un artículo que el doctor Patrick McNamara escribió para Psychology Today explicó que para estar realmente seguros de que un individuo no sueña, tendríamos que seguirlo durante años y realizar despertares de la fase movimiento ocular rápido (REM, por sus siglas en inglés), para ver si la persona soñó o no.
Agregó que solo después de años de observar a esta persona, los científicos podrían concluir que no sueña. McNamara también especula que es posible que algunas personas simplemente no tengan la capacidad de recordar los sueños, o que el sueño REM no esté necesariamente acompañado de sueños.
Por supuesto, no hay forma de probar esto todavía, por lo que los científicos no pueden decir con certeza si es posible no experimentar sueños en lo absoluto.
Los sueños ocurren normalmente durante la fase de sueño de movimiento ocular rápido (REM, por sus siglas en inglés). Tal vez tus músculos están “apagados”, pero tu cerebro y ojos tienen intensa actividad.
Si crees que no tienes sueños, lo más posible es que se trate simplemente de que no los recuerdas, explica el portal Well and Good. Hay varias razones por las cuales olvidamos nuestros sueños justo al despertar, como una alarma o cuando te despierta tu mascota; en ese momento tu cuerpo ejecuta una función que impide que la memoria de tu sueño se procese, dice un artículo de MindBodyGreen.
Por otro lado, sí es posible que se inhiba la fase REM y, por lo tanto, las personas no sueñen. Esto sucede con algunos tipos de medicación, además del consumo de alcohol y cafeína.
¿Es malo si no sueñas?
Como dice el portal MindBodyGreen, no recordar tus sueños puede parecer inquietante. Sin embargo, “no soñar” no es malo ni incorrecto.
“Las personas miden lo que creen que es la profundidad de su sueño en función de si recuerdan haber soñado”, dijo Michael J. Breus, especialista en sueño. Sin embargo, Michael encuentra problemática la asociación entre recordar los sueños y la calidad del sueño.
Michael mencionó que asumir que nuestro sueño es pobre porque no podemos recordar nuestros sueños es una evaluación inexacta e incompleta.
Sidarta Ribeiro, neurocientífica y autora de “El óraculo de la noche: la historia y la ciencia de los sueños” le dijo a MindBodyGreen algunos factores que interfieren con el sueño REM y, por lo tanto, con nuestros sueños: horarios de sueño inconsistentes, exceso de tiempo frente a las pantallas, consumo de sustancias y comer o hacer demasiado ejercicio cerca de la hora de acostarse.
Centrarse en la calidad del sueño puede resultar en una vida de sueños más activa, junto con otros beneficios comprobados de dormir mejor, como menos estrés, un sistema inmunológico más fuerte y un estado de ánimo más positivo.
Finalmente, Breus dio una advertencia: “Hay una razón por la que no siempre recordamos nuestros sueños. Algunos de esos sueños no son buenos para recordar, al menos desde el punto vista de tu subconsciente”.