El León rugió, pero dejó con vida a su víctima, y es que pese a la victoria 2-1 sobre el LAFC en la final de ida de la Liga de Campeones de la Concacaf, los Esmeraldas no aniquilaron a los estadounidenses, quienes buscarán una voltereta heroica el siguiente domingo en casa.
El cuadro de Nicolás Larcamón fue intenso desde el primer minuto y tuvieron el premio, pero el sabor que les quedó fue de insatisfacción, puesto que tuvieron jugadas ofensivas a placer con las cuales pudieron aumentar la victoria, pero no lo lograron.
Los angelinos sufrieron en el Nou Camp y, por momentos, se envalentonaron, pero tampoco les alcanzó para incomodar al cuadro mexicano, y es que Carlos Vela no tuvo su mejor noche, pues apenas tuvo un disparo que se fue desviado de la meta de Cota y fue ampliamente abucheado por la afición leonesa.