Algunos niños tienden a comerse las uñas. Aunque pareciera ser un hábito que sólo daña la apariencia de las manos, implica efectos para la salud
Las uñas ayudan a proteger las puntas de los dedos. Gracias a ellas es más fácil rascarse si tienes comezón, sacar un objeto de un luchar estrecho o quitarte una pelusa de tu ropa. Están hechas de queratina, sustancia que ayuda al crecimiento del cabello y la capa superior de la piel, informa KidsHealth. Algunos niños tienden a rechazar cortárselas conforme crecen, pero otros las cortan por sí mismos al morderlas y comérselas. Aunque este hábito pareciera ser inofensivo, puede representar daños a la salud. En esta te compartimos cuáles son.
Las uñas crecen lentamente, aproximadamente una décima de pulga, es decir, 2,5 milímetros por mes. A esta velocidad, lleva entre 3 a 6 meses reemplazar una uña por completo. Si tu niño o niña las muerde o se las come, ralentiza este proceso, quitando una capa protectora para sus dedos. Si esto te está comenzando a molestar o preocupar, también te compartimos algunas recomendaciones para ponerle a esta situación un punto final.
¿Qué problemas causa morder las uñas en niñas y niños?
La onicofagia en niños es el hábito de comerse las uñas por nervios, aburrimiento o estrés, afectando al 45% y 60% de menores de edad. Este padecimiento también puede presentarse en personas adultas. Dicha actividad aumentar los riesgos de romper, astillar o desgastar los dientes frontales. Esto incrementa para aquellos infantes que tienen problemas de ortodoncia, tendiendo a presentar reabsorción radicular o pérdida dental, previene Clínica Dental Cervantes. Clínica Barreiro identifica otros problemas:
- Problemas bacterianos: morderse las uñas significa trasladar bacterias y hongos de las manos hacia la boca. Dando lugar a infecciones o enfermedades
- Dolor y problemas de mandíbula: morderse las uñas también puede implicar problemas en la articulación temporomandibular, articulación entre la mandíbulas y el hueso temporal. Produciendo dificultad y dolores al masticar
- Halitosis: el mal aliento también puede ser otra consecuencia debido a la entrada de bacterias a la boca
- Problemas en las uñas: como lo comentamos al inicio, esto afecta al crecimiento de las uñas, así como micro roturas, dolor o escozor
Si buscas que tu niña o niño deje de morderse las uñas para evitar los padecimientos previamente mencionados, El Balcón de Mateo recomienda:
- Busca que tenga las manos ocupadas. Puede ser por medio de manualidades, juguetes, pelotas, etc.
- Mantén sus manos limpias y las uñas pulidas. Procura llevar una lima a la mano
- Utiliza esmaltes amargos de venta en farmacias o utiliza productos naturales, como ajo
- Procura alimentos y bebidas con vitamina B, la cual disminuye las ganas de morder debido a que aumenta la serotonina en el cerebro
- Si deja de hacerlo, evita que lo sustituya por otros hábitos, como morder bolígrafos, fumar, jugar con el pelo o rascarse la nariz