Defensores de los inculpados están pidiendo 30 mil pesos para pedir su libertad.
'Temo por mi vida y por la vida de mis hijos' fueron las palabras de Cinthya García al terminar la audiencia que duró tan solo 20 minutos que se realizó en el Centro de Justicia Penal de Frontera, donde los siete hombres que le dieron muerte a su esposo dentro del anexo Escudo de Salvación, pidieran al juez su libertad con la medida cautelar del brazalete.
La audiencia fue dirigida por el Juez Óscar Cadena, quien decidió suspenderla tras escuchar la petición de la defensa de los siete imputados, afirmando que la analizaría y el próximo sábado decidiría si les otorga el beneficio de la libertad.
Tras lo anterior, Cinthya García, esposa de la víctima Jesús Alfredo Salayandi Reyes, dijo estar temerosa de que los asesinos queden en libertad, pues sabe que es gente que trabaja para Erick Alfaro, dueño del anexo, quien ordenó las torturas y el asesinato de Jesús Alfredo.
Cinthya quien desde que ocurrió el homicidio de su esposo ha luchado para que las autoridades hagan justicia, con voz quebrada, comentó que no puede ser posible que metan primero a la cárcel a alguien que asesinó a un perro y a los asesinos de su esposo les otorguen la libertad.
Y es que la defensa de los siete acusados, quienes eran los padrinos del anexo y que torturaron y golpearon a Jesús Alfredo por cuatro días hasta que falleció por orden de Erick Alfaro, solicitaron al Juez Óscar Cadena que los dejara en libertad con la medida cautelar del brazalete.
Aseguró que se enteró además que el abogado les está pidiendo 30 mil pesos a cada uno, para poderles otorgar el beneficio del brazalete, ya que no se les ha fijado una fianza.