Hoy se cumple un año de la terrible masacre ocurrida en la escuela Robb de Uvalde, Texas, que conmocionó al mundo entero.
Este miércoles 24 de mayo se cumple un año de la terrible masacre ocurrida en la escuela elemental Robb de Uvalde, donde 19 niños y 2 profesoras, fueron brutalmente asesinados por un joven de 18 años que estaba armado con un rifle de alto poder.
Fue poco antes del mediodía cuando la policía recibió reportes de que un hombre había chocado su camioneta en la parte exterior de la escuela y que luego había caminado para ingresar al plantel.
Luego se supo que el joven Salvador Ramos, totalmente fuera de control, había primero disparado a su abuelita en la cabeza, para luego tomar una camioneta de la familia y dirigirse hasta la escuela, donde ya tenía planeado cometer la masacre. El intruso ingresó por una puerta que no tenía candado y se dirigió directo al salón de clases.
Fueron momentos de terror y confusión. Los reportes establecieron que el joven tirador, se encerró en un salón durante casi una hora para cometer los asesinatos.
Los niños y profesoras estaban indefensos, y algunos de ellos lograron llamar al 911 para solicitar ayuda inmediata, pero la respuesta policiaca tardó mucho tiempo. Fue calificada como una lenta respuesta policiaca.
Casi 200 policías de varias corporaciones acudieron al lugar, pero no hubo un plan inmediato de cómo confrontar al tirador.
Finalmente, un grupo de tácticas especiales ingresó y abatió al tirador.
La población de Uvalde tiene una herida profunda, muy difícil de sanar. Han pasado 12 meses, y las investigaciones que hizo un Comité Estatal reveló que el único culpable fue el tirador que ingresó para hacer daño.
El departamento de Seguridad Pública de Texas hizo una investigación interna y desocupó a tres elementos por no tener una respuesta adecuada a la emergencia y a quien era el Jefe de la Policía Escolar, Pete Arredondo.
A un año de distancia la comunidad de Uvalde sigue viviendo la profunda tristeza por la pérdida de estas vidas inocentes.
Algunas demandas civiles fueron establecidas por compensación de daños, y las familias de las víctimas y diversos funcionaros públicos siguen pidiendo al gobierno que se establezcan leyes para controlar la compra de armas de fuego, pero nada ha cambiado, hasta el día de hoy es fácil que los jóvenes tengan acceso a las armas.