¡El Newcastle vuelve a la Champions League veinte años después! El nuevo rico del fútbol inglés, comprado en 2021 por un fondo soberano de Arabia Saudí, vivió hoy una jornada histórica al lograr el punto que necesitaba para volver a la elite europea ante un Leicester al que el 0-0 le mantiene con una remota opción de evitar el descenso.
Saint James' Park vivió una noche memorable y el ambientazo en las gradas estuvo acorde con la ocasión. Pese a la lesión de Joelinton en el calentamiento, el Newcastle no dejó respirar al Leicester desde el primer minuto sometiéndole a un asedio continuo.
La posesión de balón del equipo de Eddie Howe superó el 80 por ciento aunque sus ocasiones más claras no llegaron hasta los compases finales de la primera parte cuando intensificó aún más si cabe su avalancha sobre el área visitante.
Dos postes en la primera parte
En el minuto 41, el poste salvó al meta Daniel Iversen en su mala salida al repeler el intento de Dan Burn y, tras el rechace, Wilfred Ndidi evitó el gol al sacar en la línea un cabezazo de Callum Wilson.
Aún hubo otra doble ocasión clarísima antes del descanso cuando Miguel Almirón estrelló en el poste una espectacular volea con la zurda y, en el segundo remate, Alexander Isak mandó alto el balón. El Newcastle chutó doce veces, dos entre los tres palos, en la primera parte mientras el Leicester, con Harvey Barnes y James Maddison de inicio en el banquillo, no lo probó ni una sola vez.
En la segunda parte no cambió el decorado pese a que Dean Smith dio entrada a Maddison por Kelechi Iheanacho. Aunque parezca mentira, Iversen mantuvo su portería imbatida ante la continua ofensiva del Newcastle.
Oyra vez el palo salva al Leicester
El meta danés puso una mano providencial en un remate a bocajarro, aunque algo centrado de Isak (59'), y después el poste le volvió a salvar en un córner. El defensa Wout Faes peinó por error al segundo poste, donde Bruno Guimaraes, a un palmo de la portería, cabeceó contra la madera.
Quedaba claro que el balón no quería entrar pero el Newcastle logró el punto que le faltaba para asegurar su regreso a la Champions tras 20 años de ausencia.
Susto final y paradón de Pope
Eso sí, en el descuento se llevó un gran susto ya que, en la única ocasión del Leicester, Nick Pope sacó con una gran parada un remate a bocajarro de Timothy Castagne.
La numantina resistencia da a los 'foxes' una mínima esperanza de evitar el descenso aunque en la última jornada necesita un milagro: ganar en casa a un West Ham sin nada en juego y que el Everton, con dos puntos más pero peor diferencia de goles, no lo haga en Goodison Park contra un Bournemouth también salvado.