Cada vez se ha estado notando más la solidaridad de los nigropetenses hacia los migrantes, sobre todo cuando conocen cuál es la real situación que vienen.
Piedras Negras se ha convertido en un punto importante para la población migrante debido a que la consideran primeramente una de las más seguras del país, segundo porque a diferencia de otros municipios, en esta zona hay muchas más posibilidades laborales para ellos y tercero y una de las que se resaltan como más importantes es que la comunidad nigropetense es una de las más solidarias que hay en las fronteras hacia las familias migrantes.
Monseñor José Valdés, asesor de migrantes en la parroquia de Nuestra Señora de San Juan de los Lagos señala que cada vez se ha estado notando más la solidaridad de los nigropetenses hacia los migrantes, sobre todo cuando conocen cuál es la real situación que vienen arrastrando desde que decidieron abandonar su país, resaltando que en últimas fechas se han tenido más visitas de personas que desean conocer las nuevas instalaciones que se tienen del albergue Frontera Digna, lo que tiene un gran significado, pues indica que hay preocupación por como se encuentran mientras esperan poder ingresar a Estados Unidos.
Trabajando como voluntarios. Algo que destacó es que las personas que se han acercado al albergue, algunos al ver las necesidades que prevalecen, se han ofrecido como voluntarios en el lugar, "Gracias a Dios todas estas gentes voluntarias, de lo cual no digo que es una cantidad enorme, pero hemos tenido un número de nuevas personas que quieren ser voluntarios que quieren trabajar al menos una o dos horas apoyándonos, pues si dan un minuto en la casa del migrante con mucho gusto los recibimos".
Oportunidades laborales. Monseñor Valdés comentó que respecto al tema laboral, en ocasiones no es tan sencillo que en una empresa o comercio quieran darle trabajo a un migrante, pues ellos no tienen la intensión de quedarse de forma permanente en esta ciudad, pero cuando ya se les cerraron todas las oportunidades es cuando comienzan a buscar empleo y es ahí donde comienza la labor de la Iglesia, de hacer el llamado a quienes tienen un puesto que puedan ofrecérselo, para que puedan abrirles un camino y tengan otra alternativa de poder sacar adelante a sus familias.
Conocimientos. Respecto a ello mencionó que las madres migrantes se han estado organizando dentro del albergue, donde una de ellas se queda cuidando a los niños para que las demás puedan salir a buscar trabajo, lo cual destaca no es fácil conseguirlo aunque la mayoría afortunadamente a logrado obtener como trabajadoras domésticas, otras buscan algo de acuerdo a sus conocimientos ya sé a de cocina, tejiendo pulseras, las cuales salen a vender lo que no es fácil recuperar lo que invierten, resaltando que aquí entra otra problemática, que viven es el prejuicio, el cual por desgracia nunca se va a terminar, "algunos no tienen tanto un prejuicio en sí, sino que creen que ellos vienen a quitarles las fuentes de trabajo, lo cual no es algo cierto, pues Piedras Negras tiene muchísimas fuentes de trabajo, de tal manera que los que vivimos aquí nunca vamos a poder cubrir todas esas vacantes, lo que significa que gracias a Dios si hay empleos para todos".
Necesidades apremiantes. Respecto a las necesidades que mayormente prevalecen detalló que actualmente son los insumos, pues no es lo mismo tener 50, 60 personas a estar atendiendo 200, por ello hace el llamado a todas las personas que quieran apoyar con alimentos, principalmente arroz y frijoles que es lo que más se utiliza, pero en sí cualquier comestible sé a perecedero o no, con mucho gusto y agradecimiento será bien recibido, productos que pueden entregar directamente en la Iglesia de San Juan, donde cuentan con personas que se encargan de llevar a la casa, recordando que ahora el albergue se encuentra algo retirado, por lo que pueden ir directamente a la iglesia y dar su apoyo para los migrantes.