El congresista demócrata Chuy García criticó a la administración de Joe Biden por “seguir el ejemplo” de su antecesor, Donald Trump, de militarizar la frontera
El anuncio de que el Pentágono mandará mil 500 soldados de refuerzo a la frontera con México para enfrentar la oleada migratoria que se espera una vez que llegue a su fin el Título 42 no cayó bien entre todos los legisladores estadounidenses.
El congresista demócrata Chuy García criticó a la administración de Joe Biden por “seguir el ejemplo” de su antecesor, Donald Trump, de militarizar la frontera.
“No deberíamos enviar militares en servicio activo a ocuparse de migrantes vulnerables”, dijo el representante.
“Condenamos a [el expresidente Donald] Trump por hacer lo mismo. Biden no debería seguir su ejemplo y seguir adelante con estos planes”.
El demócrata insistió en que lo que necesita Estados Unidos es una reforma migratoria y que “el despliegue militar no es un sustituto de una reforma migratoria significativa”.
El envío de tropas a la frontera, subrayó, “no sustituye a las soluciones políticas reales, como más fondos para alimentos y refugio para los inmigrantes”.
Piden nueva reforma migratoria basada en la "compasión"
Estados Unidos defendió, necesita una reforma migratoria “que aborde los principales factores de la migración y trace un nuevo camino basado en la compasión”.
La Casa Blanca subrayó que los efectivos “no” realizarán labores de detención, sino administrativas.
Los uniformados “llenarán brechas en capacidad cruciales, como la detección sobre el terreno y vigilancia, la introducción de datos y el apoyo de almacén” hasta que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) pueda afrontar esas necesidades, dijo un funcionario del Pentágono.
Sin embargo, los soldados no llevarán a cabo tareas de "aplicación de la ley".
El Pentágono enviará esos refuerzos en respuesta a una petición del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), que se encarga de las labores de seguridad en la frontera.
La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, precisó en su rueda de prensa diaria que esos efectivos adicionales efectuarán "tareas administrativas" y no "interactuarán con los inmigrantes", lo que permitirá que los agentes fronterizos se centren en sus funciones de aplicación de la ley.