Si eres usuario o usuaria de Apple, esta información podría interesarte. A partir del 1 de mayo, algunos modelos tanto de iPhone como de iPad dejarán de contar con soporte oficial por parte de la marca y podrían presentar algunos problemas de funcionamiento.
La medida afectará a personas que tengan iPhone modelo 6s y 6s Plus y iPhone 7 y 7 Plus, así como la primera generación del iPhone SE. Dichos modelos salieron entre 2015 y 2016. Tras ocho años de servicio, la obsolescencia programada finalmente los alcanzó.
Con respecto a las tabletas, el soporte dejará de ser vigente para los modelos iPad Air 2, iPad Mini 4 y el iPod Touch de séptima generación. Estos modelos se vendieron entre el 2014 y 2019.
En este sentido, a partir del 1 de mayo se prevé que aplicaciones que se optimizan para modelos más recientes comiencen a presentar funcionamientos defectuosos. También es posible que haya algunas que ni siquiera sea posible ejecutar.
¿Qué es la obsolescencia programada?
La obsolescencia programada es la determinación o programación del fin de la vida útil de un producto. Esto significa que después de un período de tiempo calculado por el fabricante o por la empresa durante la fase de diseño del mismo, el producto se vuelve obsoleto o inservible.
Normalmente las empresas recurren a estrategias como esta para procurar que las personas sigan renovando sus dispositivos. De esta manera se garantiza un ingreso constante.
Por otra parte, estas prácticas tienen un impacto negativo en el medio ambiente. Uno de los principales efectos es que a medida que es necesario sustituir un dispositivo, los residuos electrónicos también incrementan.
En este sentido, una alternativa para disminuir nuestro impacto es la posibilidad de realizar reparaciones a nuestros equipos cuando tengan alguna avería. De esta manera, en lugar de desecharlo y comprar uno nuevo, prolongamos la vida útil del que ya tenemos. Además de que representa un ahorro significativo en muchos casos.