El acapulqueño, fue clave para que Pumas volviera a la victoria
Julio González, portero de los Pumas, se reencontró con su afición. El domingo pasado, en el duelo ante el Atlético de San Luis, su nombre fue coreado debido a las atajadas que tuvo y por las cuales se llevó las palmas; sin embargo, llegar a ese punto le costó mucho sudor y malos momentos, ya que fue uno de los más señalados por el mal momento del equipo apenas el torneo pasado.“La verdad es que el primer semestre fue el primero como titular y no me salió nada. Había muchas expectativas, no las llenamos y no tuve mi mejor torneo. Llegó Sebastián (Sosa) y lo apoyé como él a mí.”, confesó Julio el jueves pasado en conferencia de prensa.
Sin embargo, el acapulqueño, de apenas 31 años, aguantó las críticas, soportó los señalamientos y fue clave para que Pumas volviera a la victoria, y es que desde el 22 de enero no sabían lo que era ganar en casa.