El Presidente aseguró que fue “una vergüenza y de pena ajena” que hubiera contratado al expresidente Felipe Calderón como su empleado.
Unas horas después de que anunciara la compra de 13 plantas de generación de energía eléctrica de Iberdrola, el presidente Andrés Manuel López Obrador retomó sus críticas a la empresa española y aseguró que fue “una vergüenza y de pena ajena” que hubiera contratado al expresidente Felipe Calderón como su empleado.
En conferencia de prensa, el jefe del Ejecutivo federal señaló que mientras Iberdrola se convirtió en una empresa preponderante en el ramo energético tras la Reforma Energética, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) iban cayendo.
“Una de las empresas que se benefician más (con la Reforma Energética) es precisamente Iberdrola, una empresa española, se asocia con un hijo de Claudio X. González, ahí está también en sociedad o estuvo el asesor principal de Carlos Salinas, (José) Cordoba Montoya, llegan los de Iberdrola a contratar a Felipe Calderón que es una vergüenza, es de pena ajena.
“Cómo un presidente de México, porque `haiga sido como haiga sido´ fue presidente de México y termina y se va de empelado de Iberdrola. Entonces Iberdrola se convierte en una empresa dominante, preponderante mientras la Comisión Federal de Electricidad va cayendo lo mismo que Pemex”, dijo.