'Soy Sacerdote para la eternidad'
El pasado 01 de abril, el padre José Calvillo Rodríguez, celebro el 25 aniversario de su Ordenación Sacerdotal, la cual recibió en el año de 1998 en su natal General Cepeda, siendo el primer sacerdote de su pueblo en lograr su ordenación.
Padre, ¿Cómo fue ese llamado por el sacerdocio?
"Empiezo a tener la inquietud vocacional en el tiempo de secundaria, que es cuando comenzaron a invitarme a participar en retiros, pero fue en el 83 cuando pude acudir a mi primer preseminario, donde no me quede por cuestiones, creo que de edad o de estudios, no recuerdo bien, después en julio del 84 fui a otro y fue cuando ya me aceptaron como alumno interno, donde ingresamos 27 alumnos, de los cuales con el correr de los años pudimos ordenarnos solo cuatro".
¿Después de su ordenación recorrió varios lugares, hasta llegar a su actual destino, que es la Catedral de Mártires de Cristo Rey?
"Si, después de mi ordenación el 01 de abril de 1998, que fue con una celebración muy emotiva, estuve en varios puntos, como Lagunas del Rey, luego en Allende, posteriormente me traslade a Monclova como encargado de la comunidad, donde tuve una gran experiencia, pues inicio mi trabajo solo, después me regresaron a Químicas del Rey posteriormente el Obispo Raúl Vera me invito a formar parte del clero de la nueva Diócesis que se formó aquí en Piedras Negras, viaje al norte instalándome en San Carlos en el 2002, pero en el 2003 se realizó la división de la Diócesis, el 25 de marzo, me traslade a Ciudad Acuña, donde inicie el proceso de construcción de una parroquia, de ahí en el 2005 pase a ser párroco en Barroterán, donde hice una de mis realizaciones pastorales y fue hasta el 2009 cuando ya vine a Piedras Negras, logrando cumplir ya 14 años aquí, donde inicie como Economo para la Diócesis, luego pase a la comunidad del Perpetuo Socorro, después fui a Cristo Rey como párroco y finalizo aquí como asesor en Catedral".
¿Por qué Monclova fue una de sus mayores experiencias?
"Fue muy bueno ahí porque fue mi primera experiencia solo, ahí la comunidad tenía una situación especial, pues en las misas generalmente había 3, 4 personas en las misas, donde al final de mi paso por ese lugar, lo cerré con todas las capillas llenas, no había una en la que faltaran personas y eso es un logro muy satisfactorio para mi y para mi ministerio".
Dentro de su trayectoria, ¿Tiene alguna experiencia o situación que le haya dejado una huella importante?
"Yo creo que viene siendo el saber cultivar la amistad y fraternidad con los sacerdotes, puedo decirte que con todos, absolutamente todos, me llevo bien, con el Obispo, con los sacerdotes y esa es una parte muy importante porque va construyendo la fraternidad, la amistad y la comunidad sacerdotal, que es un logro fraterno, pero también creo que la atención que logre en las distintas parroquias en las que he estado, siempre me ha dejado una gran satisfacción lograr una convocatoria en la comunidad, y otro logro es que tengo varios años participando dentro del Tribunal Eclesiástico desde hace alrededor de 10 años".
¿Qué diferencia ve entre el Padre José que inició su vida sacerdotal al actual?
"Te enfrentas a lo desconocido, con lo real del mundo, por lo que desde entonces, desde recién ordenado, te encuentras con años de diferencia, pero creo que el deseo de ser Sacerdote se fue madurando en el Seminario, y encuentra su plenitud cuando el Obispo se ordena como Sacerdote y ahí es donde nosotros debemos entendernos y creernos como hombre de Dios, porque nadie te lo dirá y tienes que creértelo tú".
¿No es para todos el Sacerdocio?
"No, en la misma palabra de Dios, lo vamos a encontrar, por ello debemos entender que no somos funcionarios, somos Sacerdotes y nos encontramos con muchos problemas, pero al final debemos tener la fortaleza para solucionar muchas cosas, pues no se le deja a Dios todo el trabajo, sino que haces lo que te toca y Dios hará lo que le corresponde, entonces en el caminar de todos los días"