Cuando un “lomito” llega a su etapa de adulto mayor, requiere cuidados específicos para hacer de su vejez una etapa que puedan vivir con plenitud. Por eso es importante saber cómo cuidar un perro viejo adecuadamente, cuáles son sus necesidades y qué puedes hacer para darle a tu “mejor amigo” una mejor calidad de vida.
Ya sabemos que, en México, la frase “el perro es el mejor amigo del hombre” es más que un dicho. De acuerdo con información de la Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado (ENBIARE) 2021, hasta diciembre de 2021 se registraron 80 millones de mascotas en el país, de las cuales 43.8 millones son caninos.
Lamentablemente, los “lomitos” tienen una esperanza de vida menor que los humanos, con un promedio que oscila de los 8 a los 13 años, el cual depende de factores como la raza, talla y calidad de vida.
¿Cuándo empieza la vejez en los perros?
Katia Olea Wagner, quien es bióloga, médico veterinario y etóloga clínica, explicó en entrevista que se le denomina “gerontes” a los perros que han alcanzado la tercera edad.
Es importante aclarar que la creencia de que un año perruno equivale a siete años humanos es totalmente falsa y que el inicio de esta etapa depende más bien de diversos factores, entre los que la talla y raza son los más importantes.
En razas pequeñas, aquellas cuyo peso no supera los 22 kilos, la vejez comienza a los 11 años. Para las tallas medianas, de 23 a 40 kilos, la edad adulta inicia a los 8. Finalmente, las razas grandes y gigantes, con peso mayor a los 40 kilogramos, llegan a su etapa geronte desde los 7 años.
Señales de que un perro está envejeciendo
Los primeros indicios de que un perro está alcanzando su etapa de adulto mayor, suelen ser reconocidos a simple vista: caminan más lento, se muestran agotados o su energía disminuye, su pelaje comienza a llenarse de canas y su mirada se opaca.
Aunado a ello, pueden presentar señales de otro tipo de padecimientos propios de la edad, razón por la que es indispensable que acudan a revisiones periódicas.
A partir de que han llegado a la vejez, se recomienda que los perros y mascotas en general, asistan al veterinario al menos una vez al año para un chequeo completo, además de las consultas periódicas que el animal requiera. En estas visitas se realizan estudios y análisis de sangre con los que el especialista puede detectar si existe alguna anomalía o alteración en los resultados.
Envejecer y morir dignamente, el mejor regalo para un perro
Katia O. Wagner afirma que la medicina preventiva es la clave para que los perros y mascotas en general, puedan gozar de una vida plena y envejecer dignamente.
Llevarlos al veterinario periódicamente, cuidar su salud bucal, vigilar su peso, procurar que se desenvuelvan en ambientes sanos y seguros, mantenerlos activos y tener actualizado su esquema de vacunación y desparasitación, son algunos de los aspectos que todo dueño debe supervisar. Esto no solo forma parte de cuidar un perro viejo, sino de tener una mascota en general.
A esto, se le denomina también “tenencia responsable”, término que Noé Pacheco, maestro en Ciencias por la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, describe como los cuidados y obligaciones que se asumen al ser propietario de uno o más animales de compañía.
Ambos especialistas coinciden en que la esterilización es un acto de responsabilidad, tomando en cuenta que, de acuerdo con datos recopilados por la Asociación Mexicana de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies (AMMVEPE), cada año son abandonados cerca de 500 mil perros.
Padecimientos más comunes en los perros mayores
Olea Wagner menciona que algunas de las enfermedades que mayormente se desarrollan a partir de que un perro llegó a su etapa geronte son los siguientes.
- Displasia de cadera
La displasia de cadera canina es un padecimiento que se presenta principalmente en razas grandes y extragrandes, ocasionando inestabilidad en la articulación de la cadera.
- Disfunciones cognitivas
También conocidas como demencia senil, es una patología progresiva que se presenta en perros mayores. En los canes, este padecimiento es similar al alzheimer en los humanos. Las primeras señales se dan cuando el animal olvida cosas y lugares de su rutina, además de mostrar alteraciones en su comportamiento.
Si se detectan a tiempo los signos del alzheimer, un neurólogo veterinario recetará un tratamiento que evita que progrese.
- Pérdida del oído y de la vista
A partir de los seis años y ante cualquier indicio de que su capacidad visual y auditiva esté disminuyendo, lo ideal es acudir a chequeos donde se revisará y dará seguimiento.
- Cáncer
Katia O. Wagner menciona que, aunque no es una regla, diversas variaciones de cáncer se dan cuando los perros superan su esperanza de vida. En estos casos, los especialistas evaluarán la enfermedad y si existe un tratamiento que no desgaste al animal.
De no haberlo, la bióloga puntualiza que recurrir a la eutanasia es uno de los mejores regalos que se le puede hacer a un perro que nos ha dado todo.