A pesar de sus evidentes lesiones, el actor reveló que fue retenido por los oficiales alrededor de tres horas
Guillermo Collard, actor de Televisa, hizo uso de sus redes sociales para denunciar el doble asalto que vivió en las calles de la CDMX. De acuerdo con su relato, los hechos sucedieron las primeras horas del pasado 25 de marzo, mientras se encontraba caminando y dos hombres se le acercaron para despojarlo de sus pertenencias y golpearlo brutalmente.
Con el rostro visiblemente lastimado, Collard explicó que no pudo hacer nada, pues mientras uno de los asaltantes le arrebató una cadenita que traía en el cuello, otro lo tomó del cuello hasta el grado de dejarlo inconsciente; posteriormente no sólo le quitaron absolutamente todo lo que tenía; sino que se dedicaron a pegarle, causándole algunas lesiones en el rostro y otras partes del cuerpo.
"Iba caminando, como miles de veces lo he hecho, confiado en que no me pasaría nada. Uno de ellos se acerca, me arrebata una cadena que tenía puesta, mientras que el otro me toma por la espalda y me empieza a asfixiar hasta que perdí el conocimiento. Cabe resaltar que una vez que estaba inconsciente, aprovecharon para tomar mis pertenencias y para golpearme, lo cual no veo necesario", dijo.
Cuando volvió en sí trató de buscar ayuda, y aunque en el lugar había mucha gente, nadie se detuvo a ver cómo se encontraba. El también fotógrafo, explicó que en esos momentos logró dar con un policía a quien le explicó su situación y le pidió que lo auxiliara, pero éste se negó rotundamente con el pretexto de que no podía abandonar su lugar de trabajo, a pesar de que estaba obligado a atenderlo.
"Me decían que no tenía nada, que solamente era la sangre que salía de mi nariz. Me aferré a la idea de que ellos tenían que llamar a un ambulancia y llamar a alguien que me ofreciera el servicio médico necesario y no lo hicieron con el pretexto de que no podían abandonar sus lugares de trabajo, porque la delincuencia estaba a flor de piel", agregó.
A pesar de sus evidentes lesiones, el actor reveló que fue retenido por los oficiales alrededor de tres horas, mismas en las que intentaron culparlo de lo sucedido y le dieron tiempo suficiente para que los ladrones accedieran a su información personal y bancaria. Tras exigirles atención, los policías accedieron a llamar a una ambulancia para que recibiera los primeros auxilios, pero la revisión fue tan precaria que los paramédicos ni siquiera notaron los derrames que tenía en los ojos.
Lo peor vino después, ya que no sólo hicieron oídos sordos a su petición de llevarlo a las instancias correspondientes para levantar una denuncia, sino que lo subieron a un taxi donde ocurrió el segundo asalto.
"Uno de los policías se encarga de pedirme un taxi, bueno lo paró de la calle. (El conductor) se veía un hombre bastante amable que me llevó desde la zona en la que estaba hasta mi hogar, argumentando que el había tomado el viaje por humanidad. Llegando (a mi casa) me pide mi chamarra y y mi reloj, que fueron las dos únicas cosas que no me quitaron. Entonces, fui asaltado una segunda vez, el mismo día", detalló.
Exige justicia
Guillermo también explicó que dos días después del incidente pudo acudir a hacer una denuncia formal, en la que agregó la mala experiencia con los policías, incluso, no duda que ellos hayan estado coludidos con los delincuentes, pues es ilógico que no estuvieran dispuestos a hacer su trabajo.
"La única impresión que me dieron es que estos señores, fue justo ganar tiempo para que ellos, los asaltantes pudieran hacer lo debido, a no ser de que no estaban capacitados y no conocen los derechos de los mexicanos, que lo dudo".
Asimismo, aseguró que no busca hacer ningún tipo de propaganda política, pero si exigió a las autoridades que den solución a su caso y a los miles de casos más que suceden a diario en la capital mexicana. Además, pidió que se garantice a los mexicanos que están siendo cuidado y protegidos por los mejores elementos, algo que debe ser una prioridad en estos tiempos.
"Exijo justicia, seguridad y tener a los mejores haciendo su labor. La única manera que se puede lograr este objetivo es pedir que la ley se aplique por igual a todos, al que está haciendo mal a otro y las autoridades que no están haciendo su trabajo. No merecemos menos", finalizó.