Apretar y rechinar los dientes de forma involuntaria delata a quienes sufren bruxismo. Esta afección bucodental perjudica la salud dental y genera dolores de cabeza y articulares.
El bruxismo, también conocido como la enfermedad silenciosa, es una patología que sufre aproximadamente un 70% de la población. Quienes la padecen aprietan de forma inconsciente la mandíbula y rechinan los dientes produciendo el desgaste de los mismos, es un buen momento para saber más sobre esta dolencia que no solo se produce durante el sueño, sino que también puede ocurrir de día.
En la mayoría de las ocasiones el afectado no es consciente de la enfermedad hasta que otra le advierte de que al dormir rechina los dientes, o es el dentista quien le informa tras realizarle una revisión dental rutinaria. En la mayoría de los casos de adultos la causa es el estrés.
En el caso de los menores, un 10% de los niños lo padece entre los 4 y los 6 años, según datos. En edades tempranas el estrés no suele ser la causa de la enfermedad sino un proceso fisiológico natural para estimular el crecimiento de los músculos y huesos de la cara que desaparece habitualmente cuando salen las muelas definitivas.
- Signos y síntomas del bruxismo
Un factor muy determinante es la mala higiene corporal, sobre todo entre quienes trabajan sentados durante ocho horas ya que tienden a adelantar la cabeza y cuello cargando de tensión la mandíbula. Estos son los síntomas más comunes del bruxismo que no solo afectan a los dientes sino a la salud en general.
- Hipersensibilidad aguda: Las piezas dentales se desgastan, astillan y rompen produciendo dolor en la zona mandibular.
- Sensibilidad dental: Especialmente al frío, al calor y a los alimentos dulces.
- Irradiación del dolor: El malestar puede extenderse a otros órganos produciendo dolor de cuello, oído o cabeza.
- Insomnio: El malestar producido por el dolor puede derivar en dificultades y problemas para conciliar el sueño.
- Mareos: Al provocar contracción de la mandíbula y el cuello.
- Reducción de la apertura de la mandíbula: La presión acaba limitando el movimiento de la mandíbula
- Trucos para reducir el bruxismo nocturno
Para solucionar el problema muchos profesionales recomiendan férulas de descarga para dormir. Pero además se pueden seguir otros consejos:
- Controlar la ansiedad y el estrés: A lo largo del día hay que tomarse las cosas con calma para prevenir el bruxismo nocturno.
- Meditar y practicar técnicas de relajación: De esta manera, se calmarán los nervios y se conseguirá que el cuerpo esté menos activo
- Evitar cenas copiosas: con carbohidratos refinados y bebidas excitantes.
- Emplear remedios caseros: Masticar una manzana, coliflor o zanahoria cruza antes de dormir ayuda a calmar la mandíbula.
- Aplicar calor: en esa zona con una toalla facial mojada ayuda a relajar los músculos de la cara.
- Acudir al dentista: En el caso de que estos remedios no funcionen, no hay que perder tiempo y hay que acudir al odontólogo para que confeccione una férula a medida.