Cynthia Bravo, impulsora de dicha ley en honor al nombre de su hija, sigue esperando justicia y poder recuperar a su pequeña luego de varios años de litigio.
La impulsora de la llamada “Ley Camila” en honor al nombre de su hija, Cynthia Bravo, sigue esperando justicia y poder recuperar a su pequeña luego de varios años de litigio, fallos de jueces en su contra y por fin la vinculación a proceso de su expareja, Carlos "N", acusado del delito de violencia familiar.
También acusado de haber sustraído a su hija menor de edad cuando menos en tres ocasiones; la primera, teniendo menos de seis meses y la última, hace tres años, cuando contrajo matrimonio y decidió llevarse a la menor a la casa de su actual pareja, sin notificar a la autoridad, ni a la madre.
En espera de que en breve se apruebe en el Senado la Ley Camila que busca garantizar el derecho de la infancia al amor filial de las madres, a la lactancia y al vínculo materno, así como para frenar la sustracción ilegal de los menores por parte de sus padres, una práctica recurrente en México, comentó el viacrucis que ha vivido durante cinco años.
Desde noviembre del 2018 le impidió convivir con su hija Camila y después empezaron las manipulación de la menor, de los jueces siempre a favor de su agresor.
“Él no la presentó por un mes y después, encuentro a mi hija totalmente manipulada, era otra y me decía llorando que yo no la quería, que yo no era su mamá; frases de adulto como madre es la que cuida y protege, que yo no le había cambiado los pañales, cosas que le tuvieron que decir”, recordó.
En ese tiempo, Camila, de 9 años de edad, y su madre pudieron pasar tiempo juntas, ante la presencia de familiares o por medio del Centro de Convivencia Familiar con reportes favorables, pero nunca a solas, aunque la menor no ha querido convivir con ella, ya que al parecer presenta “interferencia parental y conflicto de lealtades”, comentó Cynthia Bravo.
Después de una reunión con el senador José Narro, impulsor de la Ley Camila, la también fundadora de la ONG Las Camilas AC, a favor de las maternidades e infancias, dijo que se espera que con la vinculación a proceso de Carlos “N” se haga justicia y pueda recuperar a su hija.
Pablo Huerta, defensor de Cynthia Bravo, dijo que Carlos "N, de algún modo se escondía para que la señora no pudiera ver a la menor, por lo que se dio la vinculación a proceso por violencia familiar.
José Narro consideró que también la cultura patriarcal, que aún persiste en México, es responsable de que no se proteja a las mujeres porque hay juezas, dijo, que son más duras en sus sentencias, porque defienden más el viejo modelo donde el que predomina es el hombre.
“Esta Legislatura puede lograr todavía acciones importantes como la Ley Sabina, la Ley Camila, la Ley de las mujeres de los brazos vacíos y la que regula la maternidad subrogada, entre otras reformas pendientes que buscaremos que se aprueben en esta Legislatura, para ir construyendo un nuevo patrón de comportamiento y de actuación hacia la erradicación de la violencia contra las mujeres”, indicó.