Un astrónomo aficionado chino ha captado desde el patio de su casa el brillo generado por el impacto de un meteorito en la Luna. No es algo imposible, pues estas colisiones son bastante frecuentes, pero sí que es difícil lograrlo con un equipo relativamente casero. Por eso, sus imágenes han dado la vuelta al mundo y ya tienen a muchos expertos tras de ellas, para investigar más a fondo la roca y el cráter de impacto que ha debido dejar en la superficie lunar.
Cabe destacar que tanto la Tierra como la Luna están rodeadas de rocas que, eventualmente, pueden impactar con ellas en forma de meteoritos. Pero hay una gran diferencia. La Tierra tiene una atmósfera que, generalmente, pulveriza esas rocas, de modo que se descomponen por completo o llegan a la superficie como fragmentos extremadamente pequeños. En cambio, la Luna no tiene atmósfera y los meteoritos chocan con su superficie en todo su esplendor. No hay más que ver el terreno selenita, cubierto por completo por cráteres de impacto.
Según un proyecto realizado por la Agencia Espacial Europea (ESA por sus siglas en inglés), normalmente caen unos 8 meteoritos por hora sobre la Luna. Esto se detecta fácilmente con los instrumentos de la agencia, pero no es tan fácil con un telescopio de patio trasero, como el que empleó Daichi Fujii.
El brillo de un meteorito en la Luna
Daichi Fujii trabaja en el área de astronomía del Museo de la Ciudad de Hiratsuka, en China.
No ejerce en ninguna gran agencia espacial, pero tiene los conocimientos suficientes para buscar impactos de meteoritos en la Luna. Sabe que la mayoría de objetos que impactan en nuestro satélite son demasiado pequeños y oscuros para verse a simple vista. Por eso, lo que se detecta es el brillo del impacto. Pero no es fácil. Hay que estar mirando a la Luna en el momento adecuado. Para no dejarlo todo al azar, el 23 de febrero Fujii configuró un equipo que toma imágenes continuamente durante un periodo de tiempo concreto. Esto le permitió captar un fogonazo que claramente parecía corresponderse con el impacto de un meteorito en la Luna.
En realidad, no es el primero que capta, pero sí parece ser el más potente. Duró un segundo completo y eso es muchísimo. El astrónomo anunció lo ocurrido en su cuenta de Twitter con todo lujo de detalles, llamando la atención de expertos y aficionados.
Ahora deben tomarse imágenes de seguimiento
Gracias a vehículos como el Lunar Reconnaissance Orbiter, de la NASA, se pueden tomar imágenes de cualquier punto de la superficie lunar. Dado que los científicos planean buscar el cráter de impacto del meteorito captado por Fuji, esta podría ser una buena herramienta.
Solo así, viendo el cráter, se podrá tener más información sobre la roca en cuestión, y compararla con las imágenes que dejó la colisión. Aunque haya sido fruto de la obra de un aficionado, de ella se pueden extrapolar datos interesantes. Por eso, en astronomía la ciencia ciudadana es también muy importante. El universo es demasiado grande para unos pocos pares de ojos. Cuantas más personas se fijen en él, mejor.