Desde relojes, cocodrilos de diamantes, hasta bocetos de las piezas, se pueden ver en esta exposición
"El diseño de Cartier: un legado vivo" inaugura mañana, 15 de marzo, en el Museo Jumex. La exposición muestra 160 piezas, entre joyas, objetos decorativos y bocetos, que cuentan la historia detrás de la marca.
Entre las piezas más destacadas se encuentran joyas que pertenecieron a la aristocracia y realeza, como un broche que perteneció a la nieta sobrina de Napoleón Bonaparte, un broche de rosa con diamantes de la princesa Margarita, un broche colorido de un flamenco que fue de Wallis Simpson y un anillo de Barbara Hutton.
También hay joyas que fueron propiedad de estrellas de cine, como Gloria Swanson y la actriz mexicana María Félix. De hecho, las icónicas joyas de "La Doña", los cocodrilos con esmeraldas y diamantes amarillos, así como la serpiente con diamantes blancos, vuelven a México. La última vez que estas piezas se exhibieron en el país fue en 1999, en el Palacio de Bellas Artes.
Además de esas dos icónicas piezas, se exhibe un cinturón -que recientemente Cartier adquirió- y dos aretes que también fueron propiedad de Félix.
Entre tiaras, collares inspirados en la India, sets de maquillaje y broches con forma de pirámide, hay una sección dedicada a los relojes de Cartier, entre los que está el "Mistery Clock" que fue propiedad de José Yves Limantour, secretario de Hacienda de Porfirio Díaz. Esta pieza se exhibe por primera vez.
Pese a ser una muestra donde las joyas son las protagonistas, "El diseño de Cartier: un legado vivo" es una exposición de diseño y técnica artesanal.
Las joyas también son cultura
Ana Elena Mallet, curadora de la exposición, dijo en conferencia de prensa que si bien la joyería es un adorno, recurrir a ella es también una pieza de historia que puede proporcionar información sobre una época en específico.
Por ejemplo, en el recorrido se podrán ver joyas al estilo art-déco, antes de que ese estilo fuera reconocido y nombrado. También, las primeras piezas del recorrido están hechas en platino, no en plata ni en oro, pues no solo era más lujoso, sino que Louis Cartier -creador de la marca- lo consideraba el “metal para el siglo de la electricidad", explicó Renée Frank, directora de exposiciones de Cartier.
Sin embargo, cuando se llega a la sala, dedica a Jeanne Toussaint, quien en 1933 se convirtió en la primera mujer directora creativa, comenzó a usar oro amarillo por la crisis económica causada por las guerras, agregó Frank.
Otro ejemplo es el broche “Ave encerrada”, que fue diseñado por Toussaint como protesta contra la ocupación alemana en Francia. Por ese gesto, la directora creativa había sido convocada por la Gestapo, pero finalmente se libró de ser procesada, por lo que diseñó un segundo broche, que es “Ave liberada”. Este último y los bocetos de las dos piezas están en exhibición.
“La joyería también es cultura. (...) Ayuda a entender un momento de estilo que ya no existe”, dijo Ana Elena Mallet.
Arquitectura prehispánica, para la expo de Cartier
La museografía corrió a cargo de la arquitecta Frida Escobedo, quien actualmente diseña la nueva ala del MET de Nueva York. El diseño del espacio toma inspiración de las fotografías que tomó Josef Albers de las pirámides de Tenayuca, en los años 30.
Los muros del espacio oscuro -con la intención de hacer que el ojo se concentre en el detalle-, están cubiertos por mil paneles de concreto hechos a mano. Cada panel pesa 40 kilos y al concluir la muestra, serán reciclados, detalló Renée Frank.
"El diseño de Cartier: un legado vivo" inaugura mañana 15 de marzo y estará abierta hasta el 24 de mayo, en el Museo Jumex.