La relocalización o nearshoring ya es una realidad en México y se traducirá en la llegada de inversión extranjera directa (IED). El tambiñen llamado friendshoring es una ventana de oportunidad no solo por estar cerca de Estados Unidos, sino por el T-MEC y los otros 13 acuerdos de libre comercio que tiene con alrededor de 50 países en todo el mundo.
México tiene una historia de inversión extranjera directa antes y después del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, recordó Ildefonso Guajardo, ex jefe negociador del T-MEC. Antes del TLCAN (1994) el 90% de la IED que llegaba a México provenía de Estados Unidos. Después comenzó a llegar inversión europea, fundamentalmente española, agregó Guajardo durante su participación en la mesa Nearshoring.