La “gordofobia” es un estigma que nombra y clasifica a las personas
La Secretaría de Gobernación, a través del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), hizo un llamado a erradicar la “gordofobia” y respetar a las personas “de todas las corporalidades”, para que puedan vivir en igualdad y sin discriminación.
En el Día para la Cero Discriminación, el Conapred reiteró su compromiso de trabajar en visibilizar las diferentes formas de narrativas de odio en contra de las diversas corporalidades y pidió dejar de normalizar estas expresiones, que no pueden ser “disculpadas” bajo el concepto de libertad de expresión, porque atentan contra el derecho a la dignidad humana.
Durante la presentación del Ciclo de Conversatorios 2023: “Ser diferente es mi derecho”, con el tema “Gordofobia”, la presidenta del Conapred, Claudia Olivia Morales Reza, advirtió que es necesario romper los estereotipos de cuerpos y tallas para verdaderamente construir una sociedad incluyente y con justicia social.
Destacó que el Conapred busca la deconstrucción de narrativas de exclusión y reflexionar sobre las diversas prácticas discriminatorias, porque “las personas importan y es su derecho vivir sin discriminación”.
La subdirectora de Educación del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, Georgina Diédhiou Bello, recordó que la “gordofobia” y el “gordo odio” violentan a las personas por sus corporalidades.
“La idea es cambiar todas esas realidades, reconocer que las corporalidades son válidas, que la etnicidad, la negritud, las discapacidades, las transexualidades, las intersexualidades... las tallas bajas y todos esos cuerpos no normativos representan una realidad social que siempre han estado ahí y que no merecen ser discriminadas”, recalcó.
En su intervención, la doctora en Artes y Diseño, Erika Bülle Hernández, expresó que decir “gordofobia” es suavizar el término, porque las personas que emiten comentarios sobre los cuerpos gordos “saben muy bien que nos están violentando, saben muy bien que nos están agrediendo, saben muy bien lo que están planteando”.
Reconoció que desde las artes plásticas y las artes visuales “nos han impuesto estos cánones hegemónicos de belleza (...), nos han ido conformando con estos cuerpos con los que la verdad no cumplimos” y que excluyen las diversidades corporales.
La maestra en Antropología y Desarrollo, Izchel Cosío Barroso, recordó que los prejuicios, estereotipos y estigmas se justifican desde la salud, la belleza, la moral y en tiempos contemporáneos, desde la razón, es decir, “lo que se considere feo, malo, insano o irracional condiciona la forma en la que entendemos y en la que creemos que un cuerpo debe existir”.
Mencionó que la “gordofobia” es un estigma que nombra y clasifica a las personas: “Los prejuicios generan formas muy concretas de decir quién sí entra, quién no entra a distintos espacios e instituciones. Todavía nos falta llegar a algunos lugares en donde necesitamos garantizar que se nos trate con dignidad, respeto y en cumplimiento de nuestros derechos”.
Por lo anterior, dijo, es importante admitir que existen corporalidades diversas que no cumplen con los cánones de belleza tradicionales y aspiracionales.