La petrolera estatal Pemex prometió a fines del año pasado que a mediados de enero del 2023 dejaría de quemar gas natural en un campo importante en el sureste de México, en el contexto de una creciente presión para mejorar su pobre historial ambiental.
Sin embargo, datos satelitales analizados por científicos exclusivamente para Reuters, así como una visita de reporteros al sitio, muestran que la quema de gas del vasto campo Ixachi en el estado Veracruz no solo continuó, sino que aumentó; En enero, ardieron aproximadamente mil 300 millones de pies cúbicos de gas de cuatro quemadores en las plantas de Papan y Perdiz destinada a procesar el gas de Ixachi, según los datos satelitales, frente a los mil millones de pies cúbicos de noviembre cuando se hizo la promesa.