Pudieran ser enviados a una fosa común.
Una situación que se ha vuelto lamentable, a lo largo de los últimos años en esta frontera, es la migración, prueba de ello son los cuerpos que no logran ser identificados y que tienen que ser enviados a una fosa común, donde las probabilidades de que sean identificados en algún momento se vuelven casi nulas.
La Fiscalía General del Estado, en las últimas semanas, se ha enfocado en tratar de identificar a los dos cuerpos que fueron localizado sin vida flotando en las aguas del Río Bravo en distintos puntos; el primero a la altura del campo deportivo Cougars, y el segundo cerca del municipio de Guerrero, en un conocido rancho denominado “Los Potrillos”, correspondientes a un hombre y una mujer respectivamente.
Proceso. En la actualidad el servicio médico forense, ha confirmado que las causas respectivas de la muerte fueron asfixia por sumersión, y quedaron completamente descartadas las huellas de violencia, pero una situación que ha resultado por ser llamativa es que no se ha logrado dar con la identidad, ya que ninguna persona contaba con alguna identificación dentro de sus pertenencias al momento de la recuperación de los cuerpos. Según la información que dio a conocer el delegado de la Fiscalía General del Estado, Víctor Gerardo Rodríguez Lozano, se menciona que los cuerpos se encuentran en los cuartos fríos del servicio médico forense, donde se espera que personas acudan a tratar de identificar los cuerpos, pero debido al estado de descomposición, se les estaría aplicando el cuestionario post mortem.
Colaboraciones. Con la finalidad de qué los cuerpos puedan contar con una identidad, la Fiscalía General del Estado, también solicita el apoyo de manera permanente con el área de personas no localizadas y los propios consulado centroamericanos, presenten información para tratar de identificar a las personas; algo que destaca es que el mayor número de migrantes que se encuentran en la frontera, son originarios de Centroamérica.