Son muchas observaciones que se tienen que realizar para poder hacer un diagnóstico certero sobre algún trastorno, añadiendo exámenes médicos que ayudan en la confirmación y evaluación.
En el tema de trastornos que pueden afectar la salud o el estilo de vida de un niño, de los cuales existe una gran variedad de ellos, representan un retraso no solo en el desarrollo del pensamiento sino también en su salud, en su vida social y emocional, motivo por el cual constantemente a través de los centros de apoyo se busca que los padres pongan una mayor atención en sus hijos, lo que a largo plazo evitará que sufran consecuencias como lo es la ansiedad, problemas de comunicación y mucho más.
Marisol Carmona, coordinadora del Centro de Atención Infantil municipal que dentro de este lugar la demanda de atención ha sido elevada desde los años pasados, por lo que se cuenta con una población en alrededor de 300 menores que eran recibiendo ayuda con los servicios que se ofrecen de forma totalmente gratuita, resaltando que son variados los pacientes que se reciben, pues llegan niños con diagnósticos de autismo en sus diferentes niveles de apoyo, pero también atienden a pequeñitos con hipoacusia bilateral severa, trastorno de déficit de atención con hiperactividad, trastorno del lenguaje, niños que presentan solo un desfase en el lenguaje, menores con síndrome de Down y otros más que se les brinda el apoyo en CAI.
Detección. Algo que destacó en referencia a como los padres pueden detectar si su hijo está presentando un trastorno, es el de siempre estar observando a los niños, pues hay una línea de desarrollo que los niños deben de presentar desde la primera etapa de la infancia, deben observarlos desde bebés que en esta etapa ellos ya deben de sonreír, mostrar algún tipo de articulación y demostrar emoción, o bien en el desarrollo motriz, si se observa que un niño de un año y seis meses aún no camina es necesario buscar opinión médica igual si el menor cuenta con 3 años hay que buscar la intervención temprana para iniciar la estimulación tanto del lenguaje como la motriz y también la emocional, resaltando que estos son indicadores breves solamente, pues en realidad son temas muy amplios y que requieren de varios estudios para poder hacer una confirmación de alguno de los trastornos.
Ayuda profesional. La licenciada Carmona indicó que ante cualquier duda que se tenga sobre la salud física y emocional de los hijos es importante el buscar la ayuda profesional, pues aunque no se tenga el conocimiento adecuado para determinar que es lo que les sucede, todos los padres tienen esa corazonada de que algo está sucediendo y que se tiene que atender entonces en ese momento cuando comienza a inquietar alguna acción es importante acercarse primeramente al médico pediatra para que él haga las observaciones y subsecuentemente hará las sugerencias de con quien deben acercarse como es algún psicólogo, neuropsicología entre otros.
Apoyo y aceptación. Mencionó que la prioridad siempre va a ser el poder tener un diagnóstico temprano para poder iniciar una rehabilitación o terapia, es decir el ayudarles a que desarrollen sus áreas de oportunidad, pues si no hay un diagnóstico no se puede trabajar sobre lo que el niño necesita y dificultará que el niño alcance la mayor independencia que pueda tener dentro de sus capacidades, resaltando que a diferencia de otros años sigue variando el porcentaje de padres que aceptan no la confirmación de un trastorno, pues no es sencillo para ellos escuchar un diagnóstico como tal, cada uno lo toma diferente y lo procesa distinto, pero al final de cuentas el amor que le tienen a sus hijos es lo que hace que inicien ese camino, señalando que también para ellos se ofrecen grupos de apoyo que les ayude a enfrentar y se sientan acompañados en este largo proceso de enseñanza y autoayuda como padres de niños especiales.