Carlos Serrano, economista en jefe del banco consideró que en adelante sería adecuado que las decisiones de política.
El nivel de la tasa nominal que ya tiene México ha comenzado a inhibir la toma de créditos por parte de las empresas, advirtió el economista jefe de BBVA en México, Carlos Serrano.
Freno. Si bien el canal de transmisión de la política restrictiva al sector bancario no es tan amplio ni directo como en otros países, existe ya evidencia de que estos niveles de tasa ya están inhibiendo la toma de crédito por parte de las empresas, subrayó al participar en el Foro México Bloomberg Outlook 2023. Comentó que en adelante “sería adecuado que las decisiones de política monetaria incorporen un análisis del impacto que ya tienen en la economía, porque su efecto no es nulo”. La tasa de fondeo interbancaria se encuentra ahora mismo en 11%, el nivel más alto desde el 2001, tras 14 incrementos consecutivos de 700 puntos base.
Desde la perspectiva del economista, la comunicación que hace la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) sobre sus decisiones monetarias se ha tornado “particularmente volátil” y tras el anuncio del 9 de febrero, cuando subieron la tasa en una magnitud “sorpresiva” de 50 puntos base, abrieron la posibilidad de dos incrementos adicionales en la tasa y que la dejarán en ese nivel, sin cambio, durante el resto del año.
Tasa de interés. Específicamente proyectó que el banco central subirá la tasa en un cuarto de punto en la decisión de marzo, para dejarla en 11.25% y consideró que, dependiendo de las condiciones de la inflación y al diferencial de tasas con la Fed, podría subirla un cuarto de punto adicional para dejar la tasa terminal del ciclo en 11.50% durante todo el año. Destacó que a diferencia de otros episodios restrictivos, ahora hay una atención especial para mantener alto el diferencial de tasas con la Fed, que está en 650 puntos base. Este es el diferencial de tasas más alto de los últimos 15 años, destacó y está por arriba del promedio que había sido de 450 puntos, acotó. La impresión que deja es que hoy están más pendientes del diferencial de tasas y el tipo de cambio para que no se presenten depreciaciones del peso mexicano.