Kate Middleton quedó en las planas de todos los digitales durante los festejos por el jubileo de la reina Isabel. El comportamiento de su hijo menor dio mucho de qué hablar en aquel momento. Y si bien muchos entendieron el cansancio del pequeño Louis luego de tantas horas en el evento, lo cierto es que muchos criticaron los berrinches que había hecho en público.
Con toda la paciencia del mundo Kate Middleton intentó tener la situación bajo control. Ella podría haber explotado de furia, como nos sucede a muchas madres, y sin embargo fue más que paciente para tratar de calmar a su hijo. Lo que no sabíamos es que ella y su marido, el príncipe de Gales, siguen una especie de manual para evitar que las rabietas de los pequeños se salgan de control.
El primer truco que el príncipe Guillermo y la princesa de Gales ponen en marcha es la prohibición de gritar. Esto es algo que no se puede hacer en su propia casa. Poco a poco les fueron enseñando a que hay que hablarse con respeto, aunque estén peleando entre ellos. Hablando tranquilos pueden explicarles bien cuál fue el motivo del conflicto y así ellos pueden intervenir.
Pero, además, Kate Middleton hacen uso de un método contra las rabietas conocido como “chat sofá”. Se trata de una forma de crianza en la que no se opta por el castigo, y en su lugar se dialoga. Así ellos pueden explicarles con calma a sus tres hijos para poder afrontar el problema que tienen en familia. Incluso muchas veces los hemos visto resolver bajo esta técnica algunos altercados públicos tal como sucedió en el jubileo de la reina Isabel.
Otro de los trucos a los que recurren los príncipes de Gales es el hecho de implicarse en la vida de ellos. Tanto Kate Middleton como el príncipe Guillermo saben de las constantes comparaciones a los que son sometidos en la corona. Por ello buscan siempre que se sientan queridos e importantes los 3 por igual sin importar en qué línea de sucesión al trono se encuentres.