Perdonó la Juventus este jueves en Europa League, exhibiendo una vez más una mala gestión de un partido, y se dejó llevar ante un Nantes que consiguió contrarrestar el tanto inicial de Vlahovic, en un duelo que terminó con polémica por un posible penalti no señalado en favor de los italianos que deja totalmente abierta la eliminatoria para la vuelta.
Y eso que el choque comenzó de la mejor manera posible para la 'Vecchia Signora', que volvió a la Europa League tras nueve años de ausencia y que, tras otra genialidad de Ángel Di María, se adelantó en el marcador con el tanto de Dusan Vlahovic.
Se inventó el argentino un pase en profundidad, medido al desmarque de Chiesa para que éste cediera en bandeja de plata el tanto al ariete serbio, que en el minuto doce inauguró su cuenta goleadora en esta competición. A Di María hace ya casi dos meses que le da igual la competición que juegue, siempre quiere marcar el tempo. Y siempre lo ha logrado. Como si llevara en la 'Juve' toda su carrera.
Se ha ganado el respeto absoluto de la afición y ha cogido los galones de un equipo zarandeado en este último periodo por una sanción que ha hecho mella. Pero el campeón del mundo se ha propuesto obrar la gesta con la Juventus e intentar hasta el final devolverla a la Champions League. Pero el conjunto que dirige Massimilino Allegri volvió a gestionar mal el partido.