El Real Madrid se posiciona del subliderato de La Liga pisándole los talones al Barcelona que sigue batallando para ganar.
Cuatro días después de conquistar el Mundial de Clubes en Marruecos y sin Vinicius, por acumulación de tarjetas, el Real Madrid no se relajó, ganó con solvencia a un Elche (4-0) hundido en la clasificación y no sufrió antes de encarar diez días con la visita a Osasuna y Liverpool en el horizonte y recibiendo a Atlético de Madrid y Barcelona.
"Es un problema de concentración, organización y compromiso colectivo que no siempre tenemos", contestó, sincero, Ancelotti en la previa sobre las dificultades defensivas de su equipo en Rabat; y el mensaje caló pronto en la plantilla.
Eso sí, contra un rival que suma solo nueve puntos en 21 jornadas de Liga y que solo ha salido vencedor en uno de sus duelos, justo el anterior frente al Villarreal (3-1), y con su derrota en el Santiago Bernabéu se queda a 12 puntos de una salvación que cada día se ve más lejana.
El Real Madrid no quería sustos, y el español Marco Asensio, aún pendiente de una renovación que no se ha cerrado aún, abrió el marcador para sumar su quinto tanto en la temporada, pero este con un sabor muy especial.
El atacante anunció, en el Día Internacional del Cáncer Infantil la creación de una Fundación que lleva su nombre para ayudar a los niños en tratamiento oncológico y a sus familiares durante la enfermedad, a la vez que, al marcar este mismo miércoles, le dedicó el tanto a los niños con cáncer. Un gol que llegó tras un recorte.