Justamente eso es lo que ocurrió este domingo, con Rihanna y el duelo entre los Chiefs y los Eagles, en el Super Bowl XLVII.
No es ningún secreto que el show de medio tiempo del Super Bowl acapara la atención de millones de personas. Los poco más de 15 minutos que dura el espectáculo son capaces de registrar altos niveles de audiencia, tanto que incluso en ocasiones atrae más espectadores que el propio partido.
Justamente eso es lo que ocurrió este domingo, con Rihanna y el duelo entre los Chiefs y los Eagles, en el Super Bowl XLVII. La expectativa que generó su presentación en el partido más importante del año fue tal que según las cifras que han dado a conocer las empresas especializadas en audiencias, el espectáculo fue visto por 118.7 millones de personas, lo cual lo convirtió en uno de los tres shows más vistos en la historia, junto a los que protagonizaron Katty Perry y Lady Gaga, con 120.7 y 117.5 millones, respectivamente.