Las proyecciones del Banco Central señalan que sería hasta el 2024 cuando se pueda alcanzar la meta del 3% ya que el 2023 cerrará con 4.3%.
La inflación, el ‘enemigo’ del Banco de México (y de nuestras carteras) abrió 2023 dando señales de que no ‘dará tregua’ al ubicarse en 7.91 por ciento a tasa anual en enero, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
Cierre 2022. La cifra fue superior al 7.82 por ciento reportado en diciembre, algo que posiblemente fue tomado en cuenta por el Banco Central en sus pronósticos de la inflación para ese año. En diciembre del año pasado, el Banxico preveía que la inflación se comportaría así durante 2023: Primer trimestre: 7.5 por ciento, Segundo trimestre: 5.9 por ciento,Tercer trimestre: 4.8 por ciento, Cuarto trimestre: 4.2 por ciento. En ese momento, el Banxico calculó que la inflación regresaría a su rango objetivo (3 por ciento, +/- un punto porcentual) hasta los primeros tres meses de 2024.
Pronóstico. La ‘mala noticia’ del comunicado de este jueves es que el Banxico aumentó sus previsiones para la inflación. Ahora prevé que quede en los primeros tres meses de este año en 7.7 por ciento; ceda a 6.4 por ciento en el segundo trimestre; baje otro poco más, a 5.3 por ciento en el tercer trimestre, y cierre 2023 en 4.9 por ciento. El Banxico cree ahora que tomará más tiempo llegar a su rango objetivo, pues sería hasta el periodo abril-junio de 2024 que la inflación se ubique en 3.7 por ciento. La institución ‘sorprendió' a los mercados este jueves, que esperaban un aumento a la tasa de 25 puntos base que reflejara lo que hizo la Reserva Federal hace unos días. Sin embargo, la Junta de Gobierno del Banxico optó por unanimidad subir el referencial en 50 puntos base, a un nuevo nivel récord de 11 por ciento. En su comunicado, la institución consideró que reducirá la magnitud de los aumentos de la tasa de interés a partir de su próxima reunión, fechada para el 30 de marzo.
Al interior del índice subyacente, los precios de las mercancías aumentaron 0.91% a tasa mensual y los de servicios, 0.48%. La inflación subyacente –considerada un mejor parámetro de la inflación en el largo plazo, por excluir los precios más volátiles- creció 0.71% a tasa mensual y 8.45% a tasa anual, lo cual también estuvo por arriba de las estimaciones, pues el mercado esperaba un incremento de 8.41% anual.