Si bien la característica de Kansas City y Filadelfia pasan por la ofensiva, sus defensivas suelen hacer jugadas importantes en momentos claves de los encuentros. Con presencias importantes en las tres líneas defensivas, Águilas y Jefes podrían definir el Super Bowl LVII con una brillantez de la zona encargada de detener a Patick Mahomes y Jalen Hurts.
Desde la línea, los linebackers y la zona profunda, los dos equipos buscarán que las jugadas grandes surtan efecto. La responsabilidad de amos ha llegado, la agresividad de Filadelfia chocará contra el oportunismo de Kansas City. Sin tener un referente marcado como en el pasado lo era Tyrann Mathieu, la defensiva de los Jefes ha vivido una transformación muy marcada. El liderazgo que el profundo dejó cuando se fue a los Santos de Nueva Orleáns recayó en el tacle Chris Jones, quien se ha convertido en uno de los más importantes en la línea de golpeo. En Jones puede recaer la responsabilidad de ser la primer muralla que se encuentre el monstro de tres cabezas que tiene Filadelfia en su backfield. El surgido de Mississippi State no había sobresalido en el pasado, incluso logró sus primeras dos capturas de mariscal de campo.