Kanye West reaccionó contra una mujer que sintió el "derecho de grabarlo" en la calle por ser “una celebridad”.
Al estilo Bad Bunny, Kanye West arrojó el celular de una mujer que lo estaba grabando después del juego de basketball de sus hijos North y Saint, en Los Ángeles.
En redes sociales está circulando un video en el que se mostró al rapero discutiendo con un par de personas antes de aventar el celular con evidente enojo.
Las autoridades de California lo han nombrado sospechoso en una investigación que se inició por la disputa y posterior acto de agresión.
El video mostró a Kanye, de 45 años, saliendo del juego de sus hijos en su camioneta Mercedes-Benz, mientras avanzaba por el estacionamiento, vio a una mujer grabándolo, por lo sospechó que era una paparazzi lo estaba siguiendo.
Al intentar confrontarla, Kanye comenzó a discutir con ella desde afuera del auto de la mujer. “No tenías que atropellarme así”, comenzó a decir Ye.
“¡Si digo que paren, paren con sus cámaras”, continuó el rapero antes de que la mujer contestara que era su derecho grabar porque estaba grabando a “una celebridad”.
Al escuchar tal contestación, Kanye metió la mano por la ventanilla del auto y le arrebató el celular y luego lo arrojó hacia la calle.
Casi al mismo tiempo, el rapero se enfrentó a un hombre que también lo estaba grabando desde su auto; no se sabe si esta persona era paparazzi y desde qué momento lo comenzó a grabar.
“¿Quieres que me acerque a los juegos de tus hijos así?”, preguntó Kanye con enojo. En respuesta, el supuesto paparazzi le dijo que no era el único en acercarse a tomarle fotos, ya que había” unos cien” más.
“Todos deben detenerse cuando veo a mis ojos. Si necesito ver a mis hijos, no me pueden fotografiar. Se llaman derechos humanos”, contestó el intérprete de Good Morning.
Antes de irse, el paparazzi le contestó que tenía todo el derecho de fotografiarlo debido a que se encontraba en una vía pública.
El Departamento del Sheriff del condado de Ventura fue alertado por el altercado y a la llegada de los agentes, las presuntas víctimas entregaron los videos de ambas confrontaciones.
Al parecer, el cantante iba acompañado de su nueva esposa Blanca Censori, con quien se casó hace unas semanas en Utah, según los informes, Kim Kardashian se encontraba cerca del lugar, pero no se involucró.
Una fuente le dijo en su momento a Page Six que la familia de Kardashian no estaban seguros de que el matrimonio sea real, ya que sospechaban que se trató de un “truco de relaciones públicas”.
En todo caso, si el matrimonio es real, Kim planea tomar cartas en el asunto ya que teme que Censori se involucre en la vida de sus cuatro hijos.