Se dice que este pequeño pueblo en Siberia está cerca de las gélidas temperaturas que promedia Marte; ¡hasta 60 grados bajo cero!.
El invierno sigue su curso en el hemisferio norte del planeta, por lo que las temperaturas extremas y los paisajes llenos de nieve y hielo son comunes en las regiones más septentrionales.
Rusia, conocido por sus bajísimas temperaturas, tiene varios récords relacionados, incluyendo el lugar poblado permanentemente más frío del mundo: Oymyakon.
Corre por un chocolate bien caliente, una frazada o una buena chamarra, porque aquí te acercaremos a este gélido poblado de Siberia.
Qué tanto frío hace en Oymyakon
Los inviernos y el frío en Oymyakon son verdaderamente duros, pues dicha estación dura cinco meses. Durante este tiempo, únicamente ‘gozan’ de la luz solar seis horas al día.
Aunque viven en temperaturas extremas, sus habitantes están totalmente acostumbrados: para mantener un auto funcionando, cuentan con garajes climatizados artificialmente; saben que no pueden salir por más de 20 minutos, pues eso representaría un peligro mortal; sellan ventanas y puertas y utilizan el clima a su favor para conservar sus alimentos.
En Oymyakon es prácticamente imposible el uso de tuberías, ya que se revientan, así que sus habitantes suelen hacer sus necesidades en agujeros cavados en la nieve en pequeñas casitas fuera de sus hogares. Es cuestión de adaptarse o, literalmente, morir.
Es tanto el frío que, si estás por unos segundos a la intemperie, tus pestañas y lágrimas se congelarán. Si alguien muere, hay que hacer primero hogueras para derretir el permafrost y, luego, poder cavar la tumba.
Hablemos de números y hagamos una pequeña comparación para dimensionar: Marte, el planeta rojo, tiene una temperatura promedio anual de, aproximadamente, -62 °C, mientras que en Oymyakon han llegado hasta los -67.7 °C.
Qué hacen los pobladores de Oymyakon para vivir
Por supuesto que esas temperaturas te hacen pensar: ¿qué pueden hacer sus habitantes para vivir? Luego de unos ejemplos de cómo se han adaptado a estas duras condiciones, te contamos qué hace la población para vivir.
Oymyakon es un pueblo que se dedica a la caza de alce, reno, crianza de caballos y también a la minería. Ahí se extrae oro y antimonio, un metal muy extraño y codiciado, utilizado en la industria textil, en la medicina y en la fabricación de partes de diversos dispositivos.
La adaptabilidad del ser humano en esta región ha permitido que cuenten con gimnasio, cafeterías, bibliotecas, escuela, tiendas y farmacias.
El nombre Oymyakon, proveniente del idioma yakuto, quiere decir ‘agua que no se congela’, gracias a las aguas termales en las cercanías del poblado. ¡Una relajante manera de sobrellevar el frío!
Dónde está Oymyakon
Oymyakon es una pequeña población que no llega ni a los 1,000 habitantes. Se localiza al este de Rusia, específicamente en la República de Sajá-Yakutia, en la región conocida como Siberia.
La ciudad más cercana es Yakutsk, capital de la república antes mencionada. Para llegar en auto hasta Oymyakon, son necesarias 33 horas de manejo, pues las condiciones climáticas provocan que sea toda una odisea.
Récords de temperatura en el mundo
Como dato curioso, en la mañana del pasado 18 de enero se registró la temperatura más baja durante el primer mes del año (el cual suele ser el más frío) en Rusia desde 1982, marcando -62.7 °C en la pequeña localidad de Tongulakh, según la agencia meteorológica checa Ventusky.
Sin embargo, Oymyakon, que actualmente ronda los -50 °C, tiene el registro de la menor temperatura registrada en la historia en un lugar permanentemente habitado, lo cual sucedió el 6 de febrero de 1933, marcando -67.7 °C.
En el pueblo hay un curioso monumento que plasma una temperatura: -71.2 °C, registrada el 26 de enero de 1926. No obstante, la cifra no es oficial ya que no fue medida directamente, sino mediante extrapolación.
Ahora bien, el lugar más frío del planeta sin ser habitado se encuentra en la parte oriental de la Antártida. Ahí, el 5 de julio de 2018, el termómetro bajó hasta los -98.6 °C; rompiendo el anterior récord que pertenecía a los -89.2 °C de la base rusa de Vostok, marcados en julio de 1983.